Después de una intensa batalla, Amanda Lemus Ortiz, una niña cubana, recibió la visa humanitaria en febrero de este año que le permitió atenderse fuera de Cuba tras haber esperado durante un año un trasplante de hígado en la Isla.
La pequeña de tres años fue intervenida en un hospital de México después de que el gobierno cubano incumpliera su promesa de llevarla a operar a España.
Aunque la pequeña aun no despierta, “pasó la noche bien, todo lo que debe ser monitoreado está siéndolo y la disposición para que todo continúe avanzando está”.
A la pequeña, que lleva meses luchando por su vida, le fue otorgada una visa que le permitirá acceder a un procedimiento que en Cuba no ha podido realizarse ante la falta de recursos económicos y humanos.