Como actriz cubana, Ana de Armas confesó a la revista Variety que sabía que interpretar a Marilyn Monroe en “Blonde” suponía un “gran riesgo” del cual podría depender toda su carrera.
“Fue un gran riesgo porque pensaba ‘Ay, Dios mío, si no lo hago bien, esto se acabó’. Estaré criando vacas y gallinas en el campo. Estaré haciendo otra cosa. Nunca volveré a trabajar”, dijo al actor Eddie Redmayne para la serie “Actors on Actors” de Variety
Lo cierto es que De Armas, de 34 años, nunca pensó que tendría la oportunidad de interpretar a Monroe. “¿Cómo piensa este director australiano [Andrew Dominik] que una mujer cubana puede interpretar a Marilyn Monroe?”, se cuestionó en su momento.
“Está loco y estoy muy feliz por eso. Es uno de estos roles que quieres, y ves a otras personas interpretando, pero piensas que esa no serás tú”, agregó la nacida en La Habana, al tiempo que dijo que fue una oportunidad para probarse a sí misma y ampliar su rango como actriz.
De Armas le dijo a Redmayne que sabía que tenía que su versión del ícono de Hollywood tenía que ser perfecta y señaló que “fue algo hermoso” cuando descubrió que tenía más en común con Monroe de lo que inicialmente había pensado.
Según dijo a Variety, sus seres queridos se acercaron para decirle que se sentían representados a través de su actuación.
La actriz cubana había dicho previamente que le tomó nueve meses de entrenamiento y práctica de dialectos para lograr que la voz de Monroe fuera correcta, y calificó el proceso como “una gran tortura”.
En septiembre, de Armas le dijo a AnOther Magazine que le pidió permiso a Monroe para interpretarla cuando visitó su tumba con una tarjeta firmada por miembros del elenco y el equipo.
“Todos sentían una gran responsabilidad y estábamos muy conscientes del lado de la historia que íbamos a contar: la historia de Norma Jeane, la persona detrás de este personaje, Marilyn Monroe. ¿Quién era ella realmente?”, dijo en aquel momento.
Sobre la entrevista, Variety aseguró que la actuación “infinitamente emotiva” de De Armas hizo un interesante contraste con el londinense Eddie Redmayne, estrictamente sobrio y controlado en “The Good Nurse”, como el asesino en serie Charles Cullen.
En la conversación, De Armas y Redmayne se entusiasman con el trabajo del otro, un cumplido especialmente significativo para De Armas, ya que Redmayne conoce a su propia Monroe: actuó junto a Michelle Williams en “My Week With Marilyn” de 2011.
