La labor de espionaje de Robert Hanssen fue descrita por el Departamento de Justicia como «posiblemente el peor desastre de inteligencia en la historia de Estados Unidos».
Robert Philip Hanssen, exagente del FBI que espió para los servicios de inteligencia soviéticos y rusos contra Estados Unidos desde 1979 hasta 2001, murió en prisión el 6 de junio de 2023. Su espionaje ha sido descrito por el Departamento de Justicia como «posiblemente el peor desastre de inteligencia en la historia de Estados Unidos», según recoge la web Wikipedia.
Se cree que Hanssen, que cumplía cadena perpetua desde 2002 después de declararse culpable de cargos de espionaje, murió por causas naturales.
La información fue compartida por una fuente anónima que habló con The Associated Press. Hanssen había proporcionado información sustancial sobre las actividades de inteligencia estadounidense, incluidos detalles sobre la infiltración de las operaciones de espionaje rusas, a partir de 1985. La agencia dijo que «se cree que sus acciones provocaron la muerte de al menos tres oficiales soviéticos que trabajaban para la inteligencia estadounidense y fueron ejecutados después de su exposición.»
Nacido en Chicago, Illinois, Hanssen se unió al FBI en enero de 1976 después de una carrera en la policía de Chicago y en el mundo de la contabilidad. Tres años después de unirse al FBI, Hanssen ofreció sus servicios al Directorio Principal de Inteligencia Soviético (GRU), comenzando su primer ciclo de espionaje, que duró hasta 1981. Retomó sus actividades de espionaje en 1985 y continuó hasta 1991, cuando cesó las comunicaciones durante el colapso de la Unión Soviética por temor a ser expuesto. Sin embargo, Hanssen reanudó las comunicaciones al año siguiente y continuó hasta su arresto. Durante todo su espionaje, permaneció anónimo para los rusos, describe además la web.
Hanssen vendió miles de documentos clasificados al KGB que detallaban estrategias estadounidenses en caso de guerra nuclear, desarrollos en tecnologías de armas militares y aspectos del programa de contrainteligencia de Estados Unidos.
La agencia, en el reporte sobre su muerte, dice que Hanssen, a cambio de proporcionar información de seguridad nacional altamente clasificada a la Unión Soviética y luego a Rusia, recibió más de $1.4 millones en efectivo, fondos bancarios, diamantes y relojes Rolex.
AP señala también que «utilizando el alias “Ramón García”, pasó unos 6.000 documentos y 26 discos de computadora a sus encargados, dijeron las autoridades. Detallaron técnicas de espionaje, ayudaron a confirmar la identidad de los agentes dobles rusos y revelaron otros secretos. Los funcionarios también creían que había informado a Moscú sobre un túnel secreto que los estadounidenses construyeron debajo de la embajada soviética en Washington para escuchar a escondidas.»
«Pasó desapercibido durante años, dijo además AP, «pero investigaciones posteriores encontraron señales de alerta perdidas. Después de convertirse en el centro de la búsqueda de un topo ruso, Hanssen fue atrapado pegando una bolsa de basura llena de secretos en la parte inferior de un puente peatonal en un parque en un ‘punto muerto’ para los controladores rusos.»
Robert Hanssen fue arrestado el 18 de febrero de 2001 en Foxstone Park, cerca de su casa en el suburbio de Vienna, Virginia, después de dejar un paquete de materiales clasificados en un sitio de entrega secreta. Para evitar la pena de muerte, Hanssen se declaró culpable de catorce cargos de espionaje y uno de conspiración para cometer espionaje. Fue condenado a quince cadenas perpetuas sin posibilidad de libertad condicional, y fue trasladado inmediatamente a ADX Florence, donde permaneció encarcelado hasta su muerte en 2023.
La noticia de la muerte de Hanssen ha sido notificada al FBI, según la Oficina de Prisiones.
La historia de Hanssen, dice AP, fue llevada a la gran pantalla en la película «Breach» en 2007, protagonizada por Chris Cooper como Hanssen y Ryan Phillippe como un joven operativo de la oficina que ayuda a descubrirlo.
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