La Comisión de Atención a los Servicios del Parlamento cubano, que sesionó este fin de semana, debatió acerca del “comportamiento de la entrega de la paquetería internacional, uno de los asuntos más criticados por los cubanos en los últimos meses debido a los atrasos persistentes”, según reporta el medio oficial Cubadebate, subrayando las intervenciones de diputados acerca de “los avances alcanzados en esa área”, minimizando las numerosas denuncias de atrasos de hasta un año en la entrega, de la rotura de los envoltorios, la sustracción de productos y la sustitución de estos por basura para suplir el peso.
Mayra Arevich Marín, ministra de Comunicaciones, atribuyó los retrasos a que este resultaba “un servicio manual y repetitivo, donde había que abrir cada paquete en todos los puntos de entrega hasta llegar a su destino final. Hoy apostamos a una mayor automatización de estas prestaciones, que incluye los servicios de comercio electrónico”, anunció.
Recientemente, la empresa estatal Correos de Cuba adjudicó tales demoras en el procesamiento manual a las grandes cifras de paquetes que arriban al país, dificultad que según declararan “continuará hasta que no se culmine la automatización de la Oficina de Cambio Internacional de nuestra Empresa de Mensajería, un proyecto que debemos concluir en 2023.”
En octubre de este año, el Noticiero Nacional de Televisión (NTV) transmitió un reportaje sobre la entrega de paquetería internacional, donde se revelaron como causas de estos atrasos masivos de meses, a las malas estrategias de contratación de operarios, la deficiente organización de los procesos, lo obsoleto de la infraestructura del sistema de telecomunicaciones y el mal aprovechamiento de la jornada laboral.
“Hemos tenido que modernizar los procesos y se abrieron nuevos centros de procesamiento”, detalló Arevich ante los diputados de la Asamblea. “Si bien en 2919 recibimos unos 594 000 paquetes, la cifra ascendió a más de un millón en 2020 y a 3.4 millones en lo que va de 2021. Con la misma cantidad de personas no se puede bajar el tiempo de entrega, el cual llegó a alcanzar los seis meses de atraso”, reconoció, sin comentar nada acerca de los robos sistemáticos y documentados de productos como alimentos y medicinas en paquetes enviados principalmente desde los Estados Unidos, y la aparición de piedras y desperdicios en su lugar.
Correos de Cuba también había explicado que los retrasos se deben “a diversos factores, objetivos y subjetivos, que comienzan desde que salen de origen y las vías de transportación que se emplean, muchos de ellos a través de varios países”.
