Lo que debía ser un viaje de descanso terminó en una amarga experiencia para Crystal Jardine, una mujer de Ontario, Canadá, quien denuncia haber sido golpeada en el rostro por un hombre mientras vacacionaba en un resort en Varadero, Cuba. Pese a lo sucedido, las autoridades locales no presentaron cargos contra el agresor, dejando a la víctima indignada y sin respuestas.
Jardine había viajado junto a su esposo el pasado 28 de febrero para disfrutar de cinco días de descanso contratados con la agencia Sunwing Vacations. Sin embargo, durante su segunda jornada en el hotel, mientras se encontraban en el bar de la playa, un hombre se acercó para pedirle un cigarrillo. Según relató Jardine, tras acceder a la solicitud, una mujer en el lugar comenzó a gritarle, acusándola de coquetear con el hombre.
Minutos después, el hombre regresó enfurecido y la golpeó violentamente en el rostro. Luego se abalanzó sobre su esposo, a quien también atacó con brutalidad. Jardine describió al agresor como «un hombre corpulento» que logró inmovilizar a su esposo mientras le propinaba golpes.
El personal de seguridad del resort intervino para detener al atacante, pero en lugar de entregarlo a la policía, solo le pidieron que abandonara el lugar. Indignada y con el ojo visiblemente inflamado, Jardine exigió que llamaran a las autoridades, pero no obtuvo respuesta inmediata.
Tras contactar personalmente a la policía cubana, le informaron que si deseaba presentar cargos debía permanecer en Cuba, lo que le impidió seguir con el proceso legal. La única información que pudo obtener sobre el agresor fue que también era ciudadano canadiense. El resort se negó a brindarle el nombre del individuo o un informe oficial del incidente.
La agencia Sunwing Vacations emitió un comunicado lamentando lo ocurrido y afirmando que el caso está siendo investigado junto con el hotel y testigos del hecho. Sin embargo, al tratarse de una investigación en curso, no ofrecieron más detalles, detalla CTV News.
Por su parte, un abogado especializado en derecho penal explicó que, debido a las leyes internacionales, Jardine no puede presentar cargos criminales contra el agresor en Canadá, a menos que conozca su identidad completa y decida emprender una demanda civil por agresión.
«No es justo que alguien pueda golpearme, marcharse y quedar impune,» lamentó Jardine, quien ahora solo espera que el responsable enfrente las consecuencias de sus actos.
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