Al cierre de las primeras 24 horas de búsqueda de fallecidos tras la explosión en el hotel Saratoga de La Habana se conoció que una turista española perdió la vida en el suceso y que otra persona con esta nacionalidad se encuentra gravemente herido y recibe la atención médica requerida.
Los portavoces oficiales del Ministerio de Asuntos Exteriores en el país confirmaron la procedencia de ambos extranjeros, mientras que las fuentes consultadas por Europa Press aseguraron que los dos turistas españoles se encontraban en los espacios exteriores aledaños a la institución hotelera.
Asimismo, destacaron que el cónsul español en La Habana se mantiene en comunicación con las autoridades cubanas y al tanto de la evolución del paciente, quien se debió ser intervenido quirúrgicamente por las heridas sufridas.
Por el momento son solo dos los extranjeros involucrados en la tragedia que ya suma 25 fallecidos y unos 74 lesionados. Al momento de la explosión, producida por un escape de gas en un camión cisterna, el Hotel Saratoga no se mantenía ofreciendo sus servicios desde hacía dos años, por causa de la pandemia. Sin embargo, un número importante de trabajadores se mantenían en la instalación con el objetivo de ultimar detalles para lo que sería su próxima apertura este 10 de mayo.
Las autoridades de bomberos, así como los miembros de la cruz roja y el servicio de voluntarios se mantienen en las labores de búsqueda de personas atrapadas entre los escombros y se conoció que al menos 15 ciudadanos podrían estar atrapados en el sótano del hotel, donde se encontraban entre otras las oficinas de Recursos Humanos.
Debido al impacto y la onda expansiva de la explosión, unos 23 edificios circundantes sufrieron daños, incluyendo viviendas familiares, una iglesia y una escuela, así como el emblemático Teatro Martí. Ante los graves acontecimientos el presidente de la república, Miguel Díaz Canel aseguró que el objetivo fundamental de las autoridades era garantizar la atención inmediata a las víctimas y se garantizaban todas las condiciones para salvar la mayor cantidad de vidas posibles.
En tanto, las operaciones de rescate no han cesado y las autoridades continúan remarcando que se trató de un fatal accidente, el cual nada tuvo que ver con las presuntas operaciones de ataques terroristas que llegaron a manejarse en redes sociales. No obstante, una profunda consternación invade todo país y se supo que todas las instituciones de salud de la capital se encuentran en la absoluta disposición de ayudar con la asistencia necesaria a los lesionados.
Un movimiento de donaciones voluntarias de sangre se ha extendido por toda la capital, fundamentalmente los jóvenes universitarios han acudido al llamado urgente circulado en redes sociales, al punto de que los bancos de sangre se han visto colapsados y han debido posponer los procederes para las próximas horas. Asimismo, las actividades culturales o festivas fueron suspendidas en toda la ciudad a lo largo del fin de semana como gesto de apoyo a los familiares de las víctimas.
