Quizás porque todo México estaba pendiente del desempeño de su selección en Qatar, muchos pudieron haber pasado por alto la noticia sobre la muerte del actor cubano Jorge Zamora Montalvo, mejor conocido como “Zamorita”.
“Zamorita”, nacido en La Habana, murió los 94 años de edad en su México querido, un país que lo acogió desde hace alrededor de siete décadas y donde se ganó el cariño de los amantes de la televisión
Desde joven, se convirtió en estrella de la pantalla chica mexicana, gracias a programas como “Chispas de chocolate” y “Los Polivoces”. En esta última producción, compartió actuaciones con Eduardo Manzano y el también fallecido Enrique Cuenca.
Aunque se retiró de la televisión en el año 2000, de vez en cuando protagonizaba apariciones especiales en diferentes programas.
Lo que pocos saben es que también fue un destacado compositor. Entre sus temas más recordados se encuentran “Enséñame tú”, que se hizo popular gracias a la magnífica voz de Germán Valdés, Tin Tan, así como “Señor Juez”, “La basura” y “Bómboro Quiñá Quiñá”, que fueron inmortalizados por la Sonora Santanera.
Según reseña el obituario de El Universal, Zamorita hizo prácticamente de todo para sobrevivir en Cuba, donde se desempeñó como trabajador de comunicaciones y cartero. Pero sus mayores pasiones siempre fueron la música y la actuación.
Se desconoce la fecha exacta en la que arribó a México, pero muchos expertos la ubican en la década de los cincuenta. Veinte años más tarde, su rostro ya era familiar para los mexicanos amantes del cine y la televisión.
La Asociación Nacional de Actores (ANDA) confirmó la triste noticia en redes sociales.
“La Asociación Nacional de Actores lamenta profundamente el fallecimiento de nuestro compañero Jorge Zamora Montalvo ‘Zamorita’, miembro de nuestro gremio. Nuestras condolencias a su familia y amigos. Que descanse en paz”.
En una entrevista con La Jornada, Zamorita había revelado cómo conoció México con dos grandes amigos, uno de ellos el actor, cantante y comediante Germán Valdés Tin Tan.
“Conocí México por José Antonio Méndez y porque era amigo de Tin Tan, quien un día le dijo que lo buscara cuando fuera a México. Así lo hice y me quedé aquí. Llegué como compositor y actor”.
Zamora se refirió a aquellos momentos como una “una época muy buena económicamente y la más grande artísticamente”. “Recuerdo que desde el Tío Sam hasta Santa María la Redonda todo era fiesta, de día y de noche”, dijo.
Una de sus últimas apariciones cinematográficas fue en 2012, en la película El Mundo Fantástico de Juan Orol.
