Un alto número de parejas internacionales prefieren disfrutar sus días de luna de miel en alguno de los polos turísticos de la nación cubana, los cuales cumplen con todos los criterios de salubridad y las exigencias de control pandémico establecidas por las autoridades del Ministerio de Salud Pública de Cuba, según encuestas realizadas.
En una nota difundida por la agencia Prensa Latina se destaca que es precisamente la seguridad sanitaria que brindan los hoteles cubanos lo que ha hecho que crezcan las demandas de alojamiento en el país y se espera que las cifras alcancen los 2.2 millones de viajeros a lo largo del año, aunque estas estadísticas todavía no superen los más de cuatro millones que procesaba el sector turístico antes de la pandemia de Covid-19.
En el texto también se señala que son los viajes para bodas y lunas de miel los más demandados hasta este momento, una situación que suscriben las autoridades del Ministerio de Turismo, así como los guías del sector y los agentes de viaje.
El texto publicado por Prensa Latina destaca la variedad de hoteles con que cuenta actualmente la Isla bajo el principio de Todo Incluido, mientras que la famosa web de viajes TripAdvisor marcó algunos de ellos entre los mejores del Caribe. Es el caso del Royalton Cayo Santa María, en Villa Clara; el Meliá Cayo Coco, en los Jardines del Rey; o el Paradisus Río de Oro, en Holguín.
A esto se suma los numerosos planes y combos de viaje que ofertan muchas agencias en el país, opciones que en mayor medida se inclinan hacia el mercado internacional debido a sus altos costos para los cubanos residentes en la isla.
Décadas atrás, los palacios de matrimonios en el país tenían opciones para la luna de miel de las parejas que adquirían unión formal ante la ley, sin embargo, hasta el día de hoy, esas ofertas se reducen a la posibilidad del aún costoso sistema de Todo Incluido.
Aunque la mayoría de los hoteles ofrecen detalles y garantías para las parejas en esta condición, la reserva de al menos dos noches en cualquier de los hoteles de Varadero, el polo turístico más demandado del país, cuesta no menos de 1500 pesos por noche en las instalaciones de menor rango y en eso no se incluye la oferta de transporte.
Es así que muchos cubanos todavía no pueden darse el lujo de costear una ceremonia y además disfrutar de algunos de los paquetes de bodas y lunas de miel que reservan los mejores y más recomendados hoteles del país. Más allá de la confianza sanitaria en las instalaciones, se trata de cuánto cuestan y para quienes están pensadas las reservas en esos sitios.
Si bien es cierto que el turismo nacional ha tomado auge en el país, nunca ha logrado superar el mercado internacional, hacia donde se vuelcan los mayores esfuerzos económicos de la nación.
