El día de ayer fue una jornada muy intensa para el fútbol, ya que se disputaron dos de las finales más esperadas por los fanáticos del deporte: la Copa América y la Eurocopa. Ambos partidos dejaron imágenes completamente memorables.
En la Copa América, Argentina se enfrentó a Colombia en un duelo muy reñido que solo se decidió en la segunda prórroga, gracias a un gol de Lautaro Martínez en el minuto 112.
El marcador se mantuvo en 0-0 hasta ese momento, y la tensión se sentía desde antes del inicio del partido, debido a los graves altercados provocados por centenares de hinchas que intentaron ingresar al estadio sin entrada, lo que retrasó el inicio del encuentro más de una hora.
Colombia llegó a la final invicta tras 28 partidos y mostró toda su fortaleza durante el torneo. Sin embargo, Argentina, a pesar de perder a Messi en el minuto 66 por una lesión, demostró ser merecedora de alzarse nuevamente con la Copa.
El gol decisivo fue el resultado de una jugada colectiva que comenzó con una recuperación de balón por Leandro Paredes, un pase en profundidad de Lo Celso y un remate de Lautaro Martínez por encima de Camilo Vargas.
Con esta victoria, la selección albiceleste se alza por segunda vez consecutiva con el trofeo continental, sumando 16 títulos en el torneo organizado por la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), lo que la convierte en la máxima ganadora del campeonato.
Por otro lado del mapa, en el Viejo Continente, la Eurocopa se tiñó de rojo tras la victoria de España sobre Inglaterra por 2-1. El equipo español, que llegó invicto a la final, se enfrentó a los grandes favoritos del torneo.
Esta joven selección española le arrebató a Inglaterra la oportunidad de ganar su primera Eurocopa en la categoría masculina y se llevó todos los premios individuales: Rodri fue nombrado MVP de la Eurocopa, Lamine Yamal el mejor jugador joven, y Nico Williams el MVP de la final.
Esta marea roja había comenzado fuerte el encuentro, y durante todo el partido contó con más dominio del balón que sus contrincantes. El espíritu solo subió en el minuto 47, cuando el delantero del Athletic, Williams, marcó el primer gol con asistencia de su inseparable compañero, Lamine Yamal.
Aunque Inglaterra respondió con fuerza y empató en el minuto 73 con un disparo raso de Palmer, asistido por Bellingham, no fue suficiente para detener a España.
Tres minutos antes del final del tiempo reglamentario, Oyarzabal marcó un gol memorable tras recibir un pase de Cucurella, poniendo el marcador en 2-1. España aseguró que este resultado no cambiara durante los cuatro minutos finales de tiempo extra.
Con esta victoria, España vuelve a la cima después de doce años, convirtiéndose en el país con más Eurocopas, con un total de cuatro títulos, y un equipo promete levantar la afición y mantener el entusiasmo en el futuro.
