El gobierno de Nicaragua estableció a partir de esta semana el “libre visado” para todos los ciudadanos cubanos que deseen viajar al país centroamericano, por lo que estos no tendrán que argumentar los motivos de sus visitas ni pagar el valor equivalente de la visa, entonces con duración de 30 días prorrogables a 90.
El Ministerio de Gobernación de Nicaragua definió esta medida como “humanitaria”, dada la “cantidad de solicitudes de hermanos ciudadanos cubanos con familiares en Nicaragua, y con el fin de promover el intercambio comercial, el turismo y la relación familiar humanitaria”, según establece en la nota de prensa que aparece publicada en su web oficial.
Esta medida que entró en vigor el lunes 22 de noviembre, ofrece facilidades al “turismo de compras”, muy usual entre los cubanos, y evita el cruce de la Selva del Darién, frontera natural entre Colombia y Costa Rica, a todos los que busquen salir del país con objetivos migratorios, y que en los últimos años ha provocado la pérdida de muchas vidas cubanas en pos de atravesar Centro América para alcanzar los Estados Unidos.
El Ministerio no precisó en su comunicado si los cubanos deben obedecer las medidas aplicadas en Nicaragua para controlar la Pandemia, como es la presentación de una prueba negativa al COVID-19 con una validez máxima de tres días, o bien un pre chequeo con siete días de antelación.
Esta medida implica un cambio radical en las políticas del gobierno nicaragüense, que en 2016 cerró fronteras a todos los cubanos que acudían desde Costa Rica, generando una aguda crisis migratoria, por la acumulación de miles de migrantes en esta zona, llegándose a enfrentamientos violentos con las fuerzas militares y policiales.
Nicaragua se ha convertido en una vía importante y obligada de tránsito de emigrantes cubanos hacia la frontera de México con los Estados Unidos, desde la suspensión de la “Política de pies secos, pies mojados”. Para evitar las penurias de la Selva del Darién, muchos cubanos han intentado llegar directamente al territorio nicaragüense, mientras que los que no conseguían el visado reglamentario buscaban vías alternativas a través de países sudamericanos como Chile, Brasil o Urugay.
Además, Nicaragua es uno de los tantos destinos de los cubanos que buscan adquirir mercancías para su posterior venta minorista particular en la isla, los conocidos como “mulas”, quienes muchas veces alquilan su capacidad reglamentaria de equipaje a negocios de este tipo, a cambio de sumas determinadas, pasaje y hospedaje pagado en el país de destino por unos pocos días, suficientes para hacer las compras o recoger la mercancía previamente adquirida por contactos residentes.
