Las jóvenes activistas cubanas Carolina Barrero, Camila Rodríguez y Daniela Rojo fueron apresadas por las fuerzas de la seguridad del estado cubano mientras realizaban una manifestación pacífica, en apoyo a los familiares de los prisioneros juzgados por los actos de 11 de julio en el Tribunal Popular de Diez de Octubre, en La Habana.
Según el relato en Facebook del también activista Tata Poet, quien fuera liberado horas más tarde junto con Leonardo Romero Negrín, el momento de la captura fue en extremo violento y las fuerzas del gobierno le propinaron golpes en el estómago y las costillas, al igual que a su compañero Leonardo.
En el caso de las muchachas, según Poet, aún se desconoce el paradero de Carolina Barrero mientras que Camila Rodríguez y Daniela Rojo “se encuentran durmiendo en una celda oscura y fría por tan solo ejercer sus derechos como actores, y activistas de la sociedad civil cubana”, escribió entonces el muchacho en su muro de Facebook.
“Hoy más que nunca Cuba es un estado de terror, la policía solo sirve a un desgobierno totalitario que usa y pone todo su poder para reprimirnos sin piedad alguna”, aseguró Poet quien junto a las jóvenes apresadas y otros tantos activistas, se han mantenido ofreciendo apoyo a los familiares de los acusados por el gobierno.
En el caso de los que eran juzgados en el tribunal de Diez de Octubre, donde ocurrió la captura de las muchachas, se trataba de 33 personas, acusadas por el delito de sedición y entre ellos figuraban seis menores de edad.
Refiriéndose a lo sucedido y a la violencia utilizada por las autoridades, no solo en contra de las activistas detenidas, sino también en contra de los familiares de las personas juzgadas; la miembro del movimiento San Isidro, Anamely Ramos, aseguró que los verdaderos delincuentes son los propios miembros de la seguridad del estado, así como los militares que los mandan.
Mientras que el periodista Nelson González Breijo aseguró en sus redes: “El gobierno cubano hoy usó la fuerza represiva contra madres y abuelas que exigían libertad para los suyos, como lo hizo hace apenas un año con los artistas que se dieron cita a las puertas del Ministerio de Cultura en busca de diálogo”.
Asimismo, agregó que lo más lamentable es que miles de personas dentro y fuera de la isla están asistiendo como testigos de todo cuanto acontece y si llegara a desencadenarse la violencia en el país, no habría otro culpable más que el propio gobierno.
Mientras se desconoce el paradero de Carolina Barreto y permanecen detenidas sus compañeras Daniela Rojo y Camila Rodríguez, en las redes sociales se suman los votos de solidaridad hacia las muchachas que se han entregado al activismo social.
La propia Anamely Ramos, Saily de Amarillo, Oscar Casanella, Mario Luis Reyes y otros conocidos nombres de la esfera pública cubana actual han pedido libertad para las jóvenes.
