Quizás uno de los sueños más compartidos entre millones de personas en el mundo sea el de viajar al espacio, un anhelo que solo unos pocos logran alcanzar tras años de esfuerzo, sacrificio y dedicación.
Sin embargo, una nueva página se ha escrito en la historia de los viajes espaciales con la misión NS-31, ya que se trata de la primera tripulación compuesta exclusivamente por mujeres desde el histórico vuelo de la cosmonauta, ingeniera y política rusa Valentina Tereshkova en 1963.
Este nuevo hito ha sido posible gracias al éxito de la misión NS-31 del programa New Shepard, desarrollado por Blue Origin, la empresa aeroespacial estadounidense fundada en el año 2000 por Jeff Bezos, también creador de Amazon.
La tripulación fue de altura, no solo en sentido literal. Las seleccionadas para este histórico viaje fueron la cantante estadounidense Katy Perry; la periodista y prometida de Bezos, Lauren Sánchez; la exingeniera espacial de la NASA, Aisha Boww; la científica y activista por los derechos civiles, Amanda Nguyen; la reconocida periodista Gayle King; y la productora de cine Kerianne Flynn.
Desde antes del lanzamiento, la intérprete de «Roar» compartió en redes sociales detalles de su aventura espacial, revelando que este era un sueño que tenía desde los 15 años y que, finalmente, iba a hacerse realidad.
“¡La tripulación espacial se lanza mañana por la mañana a las 7 a. m. CT y me siento muy honrada de estar junto a otras 5 mujeres increíbles e inspiradoras mientras nos convertimos en la primera tripulación espacial femenina!”, escribió emocionada.
En redes sociales ya circulan las primeras imágenes del viaje, incluyendo un video en el que se ve a las seis mujeres disfrutando de la ingravidez. En una publicación, Perry expresó: “Todavía estoy procesando este increíble viaje. Gracias @blueorigin y a mis hermanas del espacio, ocupando espacio Y haciendo espacio en el espacio para todas – 143”.
La misión NS-31, fue liderada por Lauren Sánchez, y alcanzó unos 105 kilómetros de altitud con una duración aproximada de diez minutos. El vuelo fue automatizado completamente, por lo que las pasajeras pudieron disfrutar al máximo de la experiencia.