Un incendio localizado en San Carlos entre Padre Pico y Corona, Interior número 162 en Santiago de Cuba destruyó siete viviendas, aunque no cobró vidas humanas, según indicó al diario local Aris Arias Batalla, el jefe de Operaciones de la filial de la Cruz Roja Cubana en esa ciudad.
En la nota difundida por el diario Sierra Maestra se asegura también que en las próximas horas se profundizará acerca de las causas que originaron el accidente. En las siete viviendas afectadas convivían un total de 25 personas, de las cuales ninguna se vio lesionada durante el suceso. Hasta este momento, las autoridades todavía trabajan en cuantificar los múltiples daños materiales y ofrecer ayuda económica a los damnificados, refirió el medio de prensa oficial.
Una de las víctimas del incendio es Amarilis Calzado Cumbia quien dijo al rotativo “lo perdí todo. Lo que tengo es mi vida y mi trabajo para volver a empezar”. Según refiere, ella se encontraba trabajando y regresó a su casa a las 7:00 am cuando todavía no habían iniciado las llamas. Luego de eso salió a la bodega de la zona y alguien le advirtió de pronto que había visto salir humo de su casa. Al llegar al inmueble se percata de la situación y decide entrar a pesar del riesgo, para tratar de rescatar algunas pertenencias.
“La candela estaba cogiendo las paredes de mi casa, que colinda con otra vivienda donde ya había llegado el fuego también. Lo único que pude agarrar fue mi bolso con la Tablet y mis documentos”, relata.
Por otro lado Alicia Oliver Duany cuenta que escucho a su vecina gritando por el fuego. “Cuando miro hacia el fondo veo humo, me pongo otra ropa inmediatamente, y decido ayudar echando agua al muro fronterizo de mi casa”, dijo al periódico la señora que además asistió a las autoridades prestando su vivienda para que el personal de salvamento realizara sus actividades.
Al cierre de este año las estadísticas oficiales han anotado la ocurrencia de varios incendios, sobre todo de tipo domésticos, en los cuales se hace muy frecuente la explosión de dispositivos electrodomésticas y motos de baterías. Estas últimas, durante su proceso de carga energética, conectadas a la corriente han provocado más de un suceso lamentable, aunque casi nunca se han tenido que sufrir daños humanos, sino cuantiosas pérdidas materiales.
