Un hombre en Orlando, Florida, salvó a su labrador retriever color chocolate, Winston, de morir en las fauces de un caimán de siete pies de largo que lo atacó en el patio trasero.
El reptil se había enganchado a un lado de la cabeza de Winston, pero el hombre actuó rápido, agarró su arma y le disparó al caimán cuatro veces, salvando la vida de Winston.
Winston solo terminó con una pequeña herida punzante en la oreja, provocada por los dientes del caimán.
La Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida vino a ayudar a eliminar al caimán que quedó mortalmente herido, y terminó sus días durmiendo el sueño eterno en la parte trasera de una camioneta.
El hombre le dijo al guardabosques que creía que el caimán entró a través de una parte dañada de su cerca.
Este encuentro cercano con el depredador ha hecho que el dueño de la casa sea más consciente de su entorno y más cauteloso al dejar salir a Winston, y ya prevée reparar la cerca.
Que por cierto, vamos a ver de qué material la construye, pues en días pasados se viralizó un video donde se ve cómo un caimán logra doblar los barrotes de hierro de una cerca a la que él quiso atravesar y atravesó finalmente.
Y si Ud. cree que ese rescate fue valeroso, pues sepa que en el año 2017, un hombre de la Florida arriesgó su vida para rescatar a un oso de morir ahogado.
El hombre de Florida que salvó a un oso de morir ahogado
En el año 2015, un hombre de Florida llamado Adam Warwick saltó a un lago para salvar a un oso negro de 400 libras que estaba a punto de ahogarse, en lo que se considera sea posiblemente la mejor historia de rescate de un hombre a un animal en la historia, o al menos una de las mejores, entre tantas historias de seres humanos rescatando a animales de la muerte.
El oso había vagado por un vecindario residencial y los funcionarios de vida silvestre lo tranquilizaron para que lo reubicaran. Sin embargo, se desorientó y terminó en el agua, donde luchaba por mantenerse a flote.
Warwick, que trabajaba para la organización de conservación de la vida silvestre ‘Defenders of Wildlife’, vio la angustia del oso y decidió actuar.
Nadó hacia el oso, sostuvo su cabeza fuera del agua y lo guió hasta la orilla. Después de unos minutos de descanso, el oso pudo caminar de regreso al bosque.
Muchos elogiaron las acciones de Warwick, pero también enfrentó críticas por ponerse en peligro al acercarse a un animal salvaje.
A pesar de esto, dijo que lo volvería a hacer para salvar la vida de un animal.
Y si te gustaron estas dos historias, pues no te pierdas esta otra, que trata de unos hombres que salvaron a un águila calva americana de morir también ahogada, arrastrada por la corriente de un río.
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