La situación en Cuba es crítica en múltiples frentes. El virus Oropouche se propaga sin control, afectando tanto a los ciudadanos de la isla como a los viajeros internacionales. A su vez, el sistema de transporte está al borde del colapso, con cientos de miles de personas afectadas por la falta de viajes y la disminución en la calidad del servicio.
El régimen cubano ha admitido públicamente una creciente crisis sanitaria debido a la expansión del virus Oropouche, con más de 12,000 casos sospechosos en la isla. A esto se suma una situación crítica en múltiples frentes: insalubridad en las calles, hospitales en condiciones deplorables, apagones constantes y una crisis de transporte público que afecta a millones de ciudadanos.
Crisis sanitaria: el virus Oropouche y su impacto en Cuba
El Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) informó que desde que se detectaron los primeros casos del virus Oropouche en el país, el número de contagios ha aumentado de manera preocupante. Según Ileana Morales Suárez, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del MINSAP, citada por el medio Cubadebate, los científicos están trabajando arduamente para estudiar y comprender la enfermedad, sus efectos en los más vulnerables, como ancianos, niños y embarazadas, y las posibles formas de combatirla.
El virus Oropouche, transmitido por el mosquito Aedes aegypti y el Culicoides paraensis, afecta principalmente a zonas tropicales, y ha sido vinculado a condiciones climáticas favorables para su expansión.
Morales Suárez destacó que Cuba enfrenta, por primera vez, la coexistencia de dos arbovirosis: el dengue y el Oropouche, lo que agrava aún más la situación sanitaria del país.
«Tenemos un gran paquete de investigaciones sobre el vínculo entre el cambio climático, la enfermedad y el vector», dijo Morales Suárez, subrayando la dificultad para controlar la propagación en un entorno propicio para el desarrollo de estas enfermedades.
Alerta internacional: viajes a Cuba y contagios en Florida
El impacto del brote ha llegado más allá de las fronteras cubanas. El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) informó que todos los casos detectados de Oropouche en Florida tienen en común viajes recientes a Cuba. Con 74 casos reportados en cinco estados, de los cuales 70 se encuentran en Florida, las autoridades sanitarias han emitido una alerta de nivel dos, recomendando a los viajeros que tomen precauciones adicionales para evitar picaduras de mosquitos.
El condado de Miami-Dade, donde residen muchos cubanos, ha sido particularmente afectado, con 41 casos reportados. La alerta también exhorta a los viajeros a estar atentos a los síntomas de la enfermedad, que incluyen fiebre, dolor de cabeza, y dolores musculares, similares a los del dengue.
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Transporte público en crisis: más de 700,000 viajeros afectados
A la crisis sanitaria, se suma el deterioro del sistema de transporte en Cuba, que ha sufrido un fuerte retroceso durante el primer semestre de 2024. Según Eduardo Rodríguez Dávila, Ministro de Transporte, la Empresa de Ómnibus Nacionales ha dejado de transportar a más de 700,000 pasajeros en comparación con el mismo periodo del año anterior, debido a la disminución del coeficiente de disponibilidad técnica de su flota.
Rodríguez Dávila explicó en una declaración en Facebook que, hasta junio de 2024, la empresa realizó 25,620 viajes menos que en el mismo periodo del año anterior. La disponibilidad técnica de los ómnibus cayó del 70% en 2023 al 50% en 2024, afectando no solo la cantidad de viajes, sino también la calidad del servicio. «La calidad del servicio se ha visto afectada considerablemente, por el incremento de los ómnibus rotos en la vía y los trasbordos», señaló el ministro, subrayando que los problemas más comunes están relacionados con el sistema de embrague, mangueras hidráulicas, suspensiones y el sistema de alimentación de combustible.
Rodríguez Dávila mencionó que la falta de piezas de repuesto y el deterioro de la flota, debido a la falta de financiamiento, han agravado la situación. Esta realidad ha limitado severamente la capacidad de la empresa para satisfacer las necesidades de transporte de los cubanos, una situación que se ha visto agravada por la disminución de rutas y una menor frecuencia en los servicios.
Soluciones insuficientes y más desafíos por delante
El ministro reconoció que el gobierno cubano no cuenta con los ingresos suficientes para resolver esta crisis. Sin embargo, señaló que se están tomando medidas para mejorar la disponibilidad técnica de los medios de transporte y optimizar los recursos existentes. Entre las soluciones propuestas se encuentra el incremento de ingresos en moneda libremente convertible (MLC), los cuales podrían ser destinados a la reparación y mantenimiento de los ómnibus. Sin embargo, estas medidas han demostrado ser insuficientes frente a la magnitud del problema.
La crisis en el transporte público es solo un reflejo más de las múltiples dificultades que enfrenta el país. Mientras el sistema sanitario lucha por contener el brote del virus Oropouche, la población cubana sufre las consecuencias de un sistema de transporte colapsado, apagones frecuentes y la falta de recursos básicos.
La situación en Cuba es crítica en múltiples frentes. El virus Oropouche se propaga sin control, afectando tanto a los ciudadanos de la isla como a los viajeros internacionales. A su vez, el sistema de transporte está al borde del colapso, con cientos de miles de personas afectadas por la falta de viajes y la disminución en la calidad del servicio.
Las autoridades cubanas intentan hacer frente a estas crisis con los limitados recursos que tienen a su disposición, pero los desafíos continúan acumulándose, poniendo en duda la capacidad del gobierno para gestionar eficazmente estos problemas.