La Fiscalía General de la República confirmó que han sido juzgados y sancionados 16 ciudadanos menores de edad por delitos como sedición, sabotaje, robo con fuerza y violencia, atentado, desacato y desórdenes públicos durante las protestas populares del 11J, que la prensa oficial de la isla califica de “disturbios”. 15 de ellos fueron finalmente sancionados con penas que no implican internamiento penitenciario.
Las edades oscilan entre los 16 y 18 años según una nota oficial publicada por el medio Granma, órgano oficial del Partido Comunista, donde se comunicó además que del total de 381 personas penadas por el 11J 76 sentencias “han adquirido firmeza”, una vez que transcurrió el término “para que los acusados o el Fiscal establecieran los recursos contra las sentencias dictadas, en ejercicio que les asiste legalmente, o por haber sido notificadas por los Tribunales Populares.”
Fiscalía refiere que se le impusieron sanciones de privación de libertad a 297 de los acusados dada la “gravedad y circunstancias en que ocurrieron los hechos y a la conducta personal”. 36 personas fueron condenadas a penas entre 5 y 25 años de cárcel y a 84 de los acusados de les revocó tal sanción por penalizaciones como trabajo correccional con y sin internamiento, pero aclara la Fiscalía que “en principio, bajo condición de buena conducta”.
En esta situación se hallan 15 de los 16 menores de edad, que en un principio fueron encarcelados, provocando olas de repulsa y denuncia de sus madres y padres, familiares, activistas, ong´s y organizaciones internacionales como las propias Naciones Unidas, que reclamaron en días recientes al gobierno cubano la violación flagrante de las convenciones internacionales sobre derechos del niño.
La Fiscalía enfatizó en “velar porque se alcancen los fines educativos” de estas 76 sanciones que se aplicarán irrevocablemente ya a los cubanos que bajo la luz del nuevo Código Penal recientemente aprobado, “ejercieron abusivamente sus derechos constitucionales” por el hecho de manifestar en las calles sus disconformidades con las decisiones gubernamentales en cuestiones económicas, sociales y políticas, que no han mejorado en el último año, con el aumento de las carestías de productos básicos, la crisis energética y de vivienda, la inflación desbocada y demás factores que han hecho declarar al mandatario Miguel Díaz-Canel que Cuba tiene una situación “compleja y tensa”.
Las autoridades judiciales cubanas igualmente esperan porque estas penas refuercen “los valores, la rectificación de la conducta de los sancionados y su reinserción social”.
