A lo mejor estuvo en días pasados frente al restaurante Versailles en la ciudad de Miami o a lo mejor no; pero de lo que no hay la más mínima duda es que este cubano ¡sí que tiene suerte!
Se desconoce su nombre, pero es un verdadero suertudo. Su solicitud de ajustar su estatus migratorio en los Estados Unidos, a través de la Ley de Ajuste Cubano fue aprobada, por lo que muy pronto estará recibiendo en su buzón la llamada green card.
Nada raro hasta aquí con este cubano y la suerte, pero lo que hace este caso particularmente interesante, es que este cubano recibió la aprobación por parte del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), a pesar de haber presentado como documento de entrada al país el formulario I-220A.
Este documento se convirtió en un objeto de discordia la pasada semana, después de que la Junta Superior de Apelaciones de Inmigración de EE.UU. (BIA) invalidara la obtención de la residencia a través de este formulario, argumentando que no puede considerarse como «parole humanitario» para el ajuste de estatus migratorio en Estados Unidos.
El conflicto se originó después de que abogados del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) apelaran una decisión relacionada con el uso del formulario I-220A y ganaron el caso; una decisión que dejó en un limbo legal a decenas de miles de cubanos que ingresaron a Estados Unidos desde noviembre de 2021 con este documento, que ahora tendrán que apelar ante instancias judiciales superiores para resolver su situación migratoria en los Estados Unidos.
Muchos o todos, excepto este cubano suertudo que logró obtener su residencia permanente en Estados Unidos teniendo una I-220A.
Su nombre no fue revelado, sino que más bien fue protegido por el periodista Javier Díaz de Univisión. Sin embargo, ya la decisión está tomada, y parece un poco complejo revertir la decisión de otorgarle la residencia, incluso sin haber tenido fecha de corte, o haberse presentado en Corte ante un juez de Inmigración, como ha estado sucediendo durante años con miles y miles de cubanos en los Estados Unidos.
Pero ojo, esta no es la norma, ni parece ser que la será en los próximos meses.
Cubanos como «Tito», que entraron hace dos años por la frontera y que hace ya varios meses presentaron sus documentos para convertirse en residentes, esperan en puro nervio que les llegue la notificación de la aprobación. Si tienen suerte, si a alguien se le olvida que ya a esto se le dio para atrás, felicidades, sino tendrán que comenzar un proceso que puede resultar largo y tedioso.
Se dice que las citas, ante un juez de inmigración, en las famosas Cortes de Asilo Político están para el 2027 y 2028, pero no pocos le pondrán una ofrenda a sus santos y encenderán velas con tal de recibir la aprobación de la green card en los próximos días, a pesar de la nefasta decisión que tomar a mediados de septiembre, la Junta Superior de Apelaciones de Inmigración de EE.UU. (BIA).
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