El equipo de Cuba ha conseguido el último cupo para la próxima Copa Mundial Sub-20, que se celebrará en Chile el próximo año, durante el Premundial que tuvo lugar en varias localidades de México.
Los Leones del Caribe han hecho historia, como lo declaró la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (CONCACAF), una de las seis confederaciones pertenecientes a la FIFA y organizadora de este torneo.
Esta será su segunda participación en un Mundial Sub-20, tras su última aparición en el torneo de 2013.
El camino no fue fácil para los cubanos, quienes se enfrentaron a Honduras, un equipo que había terminado en la cima del grupo B. Cuba avanzó en la tanda de penales después de empatar 1-1 en el tiempo reglamentario.
La tensión estuvo presente minuto a minuto en un partido en el que Cuba abrió el marcador en el minuto 60 con un gol de Samuel Rodríguez. Sin embargo, a 11 minutos del final, Honduras igualó con un cabezazo de Anfronit Tatúm.
A partir de ahí, el puntaje se mantuvo igual. La situación se complicó aún más para la selección cubana cuando Marco Vega fue expulsado por tarjeta roja en el minuto 8 del primer tiempo extra, dejando al equipo con solo 10 jugadores.
Finalmente, lo que parecía ser una victoria que se escapaba, se concretó cuando Didier Reinoso anotó el penal decisivo, sellando la victoria con un marcador de 5-3 y asegurando el sueño mundialista para el equipo.
Honduras era un rival fuerte, con una notable trayectoria en los Mundiales Sub-20, habiendo participado en nueve ocasiones, incluyendo cuatro participaciones consecutivas en 2015, 2017, 2019 y 2023.
Junto a los cubanos, también clasificó México, mientras que Panamá y Estados Unidos ya habían asegurado su plaza con anterioridad.
Uno de los titulares de la selección cubana, Christian Mendoza, abandonó la delegación en Irapuato, México, antes del partido contra Honduras.
