El cuerpo sin vida del cubano Yunieski Guerra Caballero, de 15 años, fue hallado en las mañana de este jueves 13 de febrero en las márgenes del río Cuatro Caminos, en el municipio de Jesús Menéndez, en la provincia de Las Tunas.
Según informó el Ministerio del Interior (Minint) en redes sociales, el adolescente estaba desaparecido desde el lunes 10 de febrero, tras asistir a una actividad festiva en la comunidad de Cuatro Caminos (Naranjales).
El cadáver de Yunieski apareció un día después de que su hermano mayor, Augusto Guerra Caballero, de 21 años, fuera encontrado ahorcado en su domicilio.
Ambos hermanos habían ido juntos a la fiesta en Naranjales, por lo que han surgido muchas preguntas sobre la posible conexión que pudiera existir entre sus trágicas muertes.
Las autoridades aseguraron que investigan el caso para esclarecer lo sucedido y que informaran a la población sobre el esclarecimiento de los hechos.
“Sucesos como estos conmueven a todo el pueblo, y más cuando involucran a menores de edad”, expresó el Minint en su nota informativa ante la conmoción que han desatado tan terribles eventos.
“Eran unos niños”; “Qué raro todo”; “Tan jóvenes”; “¿Hasta cuándo estaremos viviendo momentos de terror?”; “Pobre madre”; “Seguro fue algo grave” y “Qué dolor para esos padres”, fueron solo algunos de los lamentos expuestos por cientos de internautas en redes.
Lamentablemente, la crisis económica, el deterioro social y la falta de transparencia del oficialismo han hecho que la percepción de inseguridad y de incremento de la criminalidad se extienda por todo el país, en especial en zonas rurales y periféricas de las ciudades.
Mientras el gobierno no publica estadísticas sobre los índices de criminalidad en Cuba, noticias sobre asesinatos, robos violentos y agresiones son cada vez más vistas en el ciberespacio y en medios de prensa independientes.