El joven de origen cubano George Alejandro Castellanos murió baleado sobre las 3:30 de la madrugada del sábado 6 de abril, mientras realizaba su trabajo como jefe de seguridad en el Martini Bar de la ciudad de El Doral en Miami, Estados Unidos.
Según precisó la policía del condado de Miami-Dade, un grupo de personas comenzó a discutir al interior del Martini Bar en el City Place de El Doral, por lo que Castellanos intervino y fue asesinado por un hombre que sacó una pistola.
El canal WSVN dijo que la policía le comunicó a la familia de la víctima que la discusión comenzó porque dos clientes se pelearon aparentemente por la almohada del sofá.
“Estamos destruidos, totalmente destruidos”, expresó devastada la madre del joven, Jeanina Castellanos, a Telemundo 51 y NBC6.
La madre detalló que su hijo recibió “dos tiros en el pecho” cuando intentaba “valientemente” controlar al asesino. “Dio su vida por todos los que sobrevivieron”, señaló.
“Se me derrumbó el mundo. Y lo tengo derrumbado. No hay forma de cómo levantarme”, declaró por su parte el cubano George Castellanos, padre del joven fallecido, a quien cariñosamente llamaban “Gordo”.
“Yo a mi hijo le mandé un mensaje y le dije ‘Pipo, ¿dónde estás? Quiero verte’, y no me respondió”, contó entre lágrimas a América TeVé.
“Lo único que él hizo fue separar la bronca, meterse en medio de la pistola para que no pasara nada más y lo mataron a él. Él no tenía arma, él sólo tenía un flash light para decir ‘Hay un accidente’ y murió por proteger a los demás”, añadió sobre un hijo y un padre “maravilloso”.
Los padres del muchacho resaltaron además que no fumaba, estudiaba ciencias biológicas y justicia penal en la Universidad Internacional de Florida (FIU, por sus siglas en inglés) y se iba a graduar el mes próximo.
Además, Castellanos era padre de una niña de dos años, Everlyn Marie. “Era excelente, recogía a su hija en la tarde, la bañaba y la dejaba lista para poder ir a trabajar”, relató su madre.
“La vida es muy injusta muchas veces. Ahora una niña sin su padre, una mujer sin esposo y una madre sin su hijo. Que desde el cielo les des muchas fuerzas porque aquí se le acaba la vida a cualquiera”, opinó un cubano que reside en Miami.
Peter Jordan, que estaba al interior del Martini Bar cuando escuchó los disparos, aseguró que todo sucedió muy rápido. “Estábamos ahí para divertirnos y de repente estábamos escapando a las balas que, literalmente, pasaban a pulgadas de nosotros”, contó.
Dos agentes de la policía de El Doral, que estaban trabajando en el área, respondieron de inmediato y dispararon y mataron al pistolero. Aunque el sospechoso fue abatido, siete personas, incluyendo a uno de los agentes, resultaron heridas de bala.
Más tarde, el tirador fue identificado como Jamal Wayne Wood, de 37 años, y presuntamente natural de Baltimore.
La alcaldesa de El Doral, Christi Fraga, convocó a una reunión especial la próxima semana para discutir una ordenanza que regule los horarios de los centros nocturnos en la ciudad.
“Miraremos a la evidencia que nos ponga en la dirección de la decisión correcta para que nuestra comunidad permanezca segura”, precisó Fraga.
Castellanos recibirá su título póstumo en mayo próximo, confirmó FIU.
De acuerdo con lo que detalla una de las campañas de recaudación de fondos abiertas en su nombre para costear los gastos de su funeral y ayudar a su familia, Castellanos estaba haciendo los trámites para poder convertirse en policía.
Ese padre esta destro ado. Dios mio. Tienen un dolor insuperable. Me parece que no van a superare esta perdida. Lo veo asi.