No sucedió en la boda, pero este padrino se quedó finalmente con la novia
Seguramente Ud. ha visto una de esas películas donde en plena boda sucede algo que arruina los planes. Una persona con una historia que contar. Un viejo amor que aparece de repente. Alguien que se confiesa… Incluso hemos visto como el padrino hace su discurso… y arruina la boda borracho pues la novia se entera ahí mismo que su futuro esposo no es tan bueno como lo pintan… En fin, ¡hemos visto de todo!
Este caso es muy similar. Involucra al padrino de la boda y a la novia; aunque no fue tan «drámatico».
Digámoslo así: no sucedió «lo ideal». Que el Padrino confesase su amor ante la novia en plena fiesta de celebración y terminase ahí mismo «levantándosela» a su mejor amigo. Sí, porque el padrino de la boda es eso: the best man. El mejor amigo del novio.
Pero sucedió algo parecido, porque finalmente, no sin antes batallar y sufrir, el padrino le robó la novia al novio después de confesarle el amor en su discurso de boda.
Este es el caso de Desiree White, de 32 años, quien finalmente se divorció de su esposo para casarse con su amigo de toda la vida y el padrino de su boda, Bryant, después de que él confesó su amor eterno por ella mientras brindaba por su boda con su entonces mejor amigo.
O sea, que sí, que el padrino en plena celebración confesó el amor por la novia. Aunque «no se la levantó» ese mismo día. Transcurrió un tiempo. Perseveró. Esperó. Y triunfó.
Desiree recuerda que en plena boda, el padrino dijo:
«Recuerdo el primer momento en que vi a Desiree, la amé. Me enamoré de ella. Sabía que ella tenía que ser mía. Pensé que era la persona más hermosa que había visto en mi vida”
Así dijo el padrino de la boda que se celebró en el 2010.
«Ella es la mejor persona que he conocido. Nunca he conocido a nadie como ella. Luego descubrí que ya tenía novio y pensé que necesitaba encontrar una manera de conseguirla, pero luego conocí [al exmarido de White] y nos hicimos amigos”, recordó.
Desirée recuerda que en plena celebración de la boda, ante 200 invitados, aquel hombre, el padrino, se babeaba literalmente por la novia.
Foto: Cortesía de Desiree White para medios
El padrino eventualmente terminó su discurso, y nada pasó. Pero… las vueltas que da la vida.
“Bryant y mi exmarido se convirtieron en mejores amigos y, como eran chicos, hacían muchas cosas juntos. Hicieron todo juntos”, dijo Desirée.
“Presenté a Bryant [en citas con otras mujeres] tantas veces,» confesó la chica.
Pero el hombre estaba tan enamorado de ella, que no cedió a la tentación.
Al final, cuando el matrimonio de ella se desbarató, el padrino estaba ahí. Esperándola. No estaba vestido de smoking, pero estaba listo.
Comenzaron a salir a cenar. A bailar. A darle ánimos, él a ella. A hacerla feliz. Como amigos. Hasta un día en que no pudo más y le plantó el beso. Ella se lo respondió.
Ya el resto se lo podrán imaginar. Ahí están ellos. Felices. Con cuatro hermosos niños.
Foto: Cortesía de Desiree White para medios
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