Un cubano identificado como Oscar Luis Tasse Durán, de 32 años, que llegó a la Florida hace ocho meses después de un peligroso viaje en bote desde Cuba, falleció lamentablemente el pasado 26 de febrero en un accidente en el puente Howard Frankland.
El accidente fue causado por un conductor ebrio.
La Patrulla de Carreteras de Florida identificó al conductor homicida como Alexander J. Hoffman, de 29 años, quien fue acusado de DUI, daños a la propiedad por DUI, homicidio involuntario por DUI y homicidio vehicular. Tasse murió en el lugar del accidente, mientras que el conductor del vehículo utilitario deportivo Chevrolet sufrió heridas graves y fue hospitalizado en estado crítico.
El diario Tampa Bay señala que el cubano siempre llevaba consigo una foto de su familia en Cuba, y que su sueño era traer a su madre y hermano menor para comenzar una nueva vida en Tampa.
Tampa Bay cita a amigos de la víctima en Tampa, quienes describen a este cubano fallecido como «una persona amable y trabajadora, con una sonrisa, un saludo y una broma para compartir.»
Según dijeron al medio, el cubano «practicaba deportes, especialmente fútbol, y le gustaba ir a pescar los fines de semana. También estaba decidido a estudiar, mejorar su inglés y hacer nuevos amigos en Tampa y St. Petersburg.»
El joven cubano ya se había incorporado a trabajar a pesar del poco tiempo que llevaba en los EE.UU. y tenía dos trabajos.
En Cuba, trabajó en el Hotel Ocean Casa del Mar. Así lo despidieron sus amigos del hotel.
Claudia Álamo, una amiga suya, escribió en un post en Facebook:
«Mi negro no sabes cuanta tristeza dejas pero quiero recordarte riendo, cantando debajo de los pinos en el pedagógico, en las noches de mejunje, en los días de cafés y en las épicas fiestas agua en las q te robabas el show. No quiero recordarte triste quiero recordarte tan alegre como eras. Un beso al cielo mi vida y esto no es un hasta nunca. Todos los q te conocimos jamás te vamos a olvidar.»
Así se despidió de él otro de sus amigos, Rafael La O Arredondo:
«Los que tuvimos la suerte de trabajar contigo, te recordaremos siempre por el gran ser humano que eras.»
Los amigos del cubano fallecido crearon una página de GoFundMe para repatriar sus cenizas a su ciudad natal de Baracoa, en la provincia de Guantánamo, donde se realizará una ceremonia en su honor. La iniciativa ha recaudado más de $9,000 de la meta de $5,000 que se propusieron.
Edy García, uno de los organizadores, dijo que Tasse “Le quedaba mucho por hacer en esta vida, y todo se lo quitaron en una noche”, dijo García. “Él solo había estado aquí durante ocho meses. Su propósito era prosperar y trabajar sin descanso para tener a su madre y a su hermano a su lado, lo cual no pudo lograr”.
Edgard Matos, hermanastro de la víctima, quedó desconsolado al enterarse de la muerte de Tasse.
“No lo podemos creer”, dijo Matos, de 25 años, durante una entrevista con el Tampa Bay desde Cuba.
“Oscar fue la persona más carismática y alegre que he conocido. Era el mejor hijo y amigo del mundo. Él era mi modelo a seguir”.
“Oscar nos enseñó el valor de la amistad y viviremos para agradecerle mil veces por permitirnos ser parte de su vida”, dijo Matos.
“Va a ser difícil decir adiós”, concluyó.
Keyler Lara, una amiga cercano de Tasse, lo describió como un ser humano amable y trabajador.
“Él nunca dijo ‘No’ a sus amigos y familiares”, dijo Lara.
“Oscar era amado por todos. Con tan solo 32 años salió de Cuba buscando un mejor futuro, un nuevo camino, para él y su familia”, añadió.
Según dijo el medio desde la Florida, Tasse y otros cinco cubanos cruzaron en mayo el Estrecho de Florida en una pequeña embarcación que zozobró antes de llegar a las costas de Golden Beach, en el condado de Miami-Dade.
Alcoholismo, conductores ebrios. Muertes.
La muerte de Tasse es un recordatorio del peligro que enfrentan muchos inmigrantes al llegar a Estados Unidos en busca de una vida mejor.
A menudo, arriesgan sus vidas en viajes peligrosos para cruzar la frontera o llegar en botes pequeños a las costas de Florida. Además, muchos enfrentan discriminación y hostilidad en un país que no siempre les da la bienvenida.
Este trágico incidente también pone de relieve el peligro de conducir bajo los efectos del alcohol. Las estadísticas muestran que el alcohol es un factor en aproximadamente un tercio de todas las muertes por accidentes automovilísticos en Estados Unidos.
Según estadísticas de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de los Estados Unidos, en 2019 se registraron 10,142 muertes en accidentes de tráfico relacionados con el consumo de alcohol en todo el país.
En Florida, en el mismo año, hubo 814 muertes en accidentes de tráfico, y el 26% de esos accidentes fueron causados por conductores ebrios. Además, Florida se encuentra en el puesto número tres en la lista de los estados con más muertes relacionadas con el alcohol en el tráfico, solo superado por California y Texas.
En el año 2021, se reportaron 2,539 arrestos por conducir bajo la influencia del alcohol en el condado de Hillsborough, donde se encuentra la ciudad de Tampa. Además, según el informe anual de seguridad vial de la ciudad de Tampa, en el año 2019 se registraron 5,028 accidentes de tráfico en la ciudad, de los cuales 27 resultaron en muertes y 1,902 en lesiones. De estos accidentes, se determinó que 322 fueron causados por conductores bajo la influencia del alcohol o las drogas.
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