En un giro sorprendente de los dramas maritales de Miami, una mujer cubana fue arrestada tras ser acusada de colocar un dispositivo de rastreo o GPS en el carro de la amante del esposo de su amiga.
Lourdes García-Mesquida, de 53 años, fue arrestada el martes y enfrenta cargos por acoso agravado, según los registros de la cárcel de Miami-Dade. El incidente, que ocurrió a mediados de septiembre, ha puesto en evidencia los peligros de dejarse llevar por los celos y tomar la justicia por mano propia.
Según el informe del arresto, donde puede verse la nacionalidad cubana de la infractora, los hechos comenzaron el 14 de septiembre, cuando García-Mesquida fue captada en cámaras de seguridad rondando el automóvil de la supuesta amante de su amiga, actuando de manera sospechosa.

Al día siguiente, la víctima revisó su vehículo y encontró un rastreador GPS marca Spytec debajo de él, que presuntamente fue colocado por la cubana. La situación tomó un giro más alarmante el 18 de septiembre, cuando García-Mesquida fue vista de nuevo alrededor del vehículo de la víctima, esta vez colocando un objeto no identificado debajo del carro.
Un testigo que presenció la escena decidió confrontar a García-Mesquida, quien, según el informe policial, alegó estar «confundida» y que había sido enviada por una amiga que le comentó que su esposo le había sido infiel. Tras el enfrentamiento, la mujer sacó el rastreador de debajo del carro, pero para ese momento ya había sido captada por las cámaras de vigilancia.
El video de seguridad fue mostrado a la víctima, quien decidió enseñárselo a su novio, un hombre casado. Él, a su vez, identificó a la mujer como una amiga de su esposa, confirmando así la identidad de García-Mesquida, lo que facilitó su posterior arresto.
Los detalles del caso han generado controversia, especialmente después de que la mujer fuera presentada en la corte. Los fiscales señalaron que el cargo adecuado para la cubana debía ser por instalar ilegalmente un dispositivo de rastreo o GPS, lo cual es un delito grave de tercer grado en Florida, gracias a una nueva ley que prohíbe la colocación de rastreadores en la propiedad de otra persona sin su consentimiento.
A pesar de los serios cargos que enfrenta, el abogado de García-Mesquida argumentó que ella no representa un peligro para la comunidad, subrayando que no tiene antecedentes penales. El juez le concedió la libertad condicional con una fianza de 2.500 dólares.
Por su parte, la víctima declaró a Telemundo 51 que ya no mantiene una relación amorosa con el hombre involucrado en este escándalo, lo que añade un componente de ironía a toda esta complicada situación.
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