En una entrevista exclusiva con EFE, el reconocido escritor cubano Leonardo Padura compartió sus preocupaciones sobre la situación actual en Cuba, describiéndola como una de las crisis más profundas que ha enfrentado el país caribeño.
Conocido por su capacidad para retratar la realidad social cubana a través de sus obras literarias, Padura expresó su inquietud por la falta de esperanza que prevalece en la isla.
Para Padura, la situación actual en Cuba representa otra cresta en una larga crisis que ha llevado al país a tocar fondo.
Aunque la escasez de alimentos, combustible, electricidad y otros recursos es evidente, el escritor considera que la mayor carencia es la esperanza en un futuro más prometedor.
Los cubanos se enfrentan a un panorama desafiante donde el control y el miedo imperan, como se puso de manifiesto, dijo, durante las protestas de 2021, que fueron reprimidas con severidad por las autoridades.
En cuanto a su trabajo como escritor en Cuba, Padura destaca que no es una tarea sencilla.
Aunque ha logrado mantener una mayor autonomía al enviar sus manuscritos directamente a sus editores en Barcelona, evitando así la censura gubernamental, reconoce que para muchos otros autores la situación es más difícil.
Padura reveló que para algunos autores, la opción ha sido buscar alternativas creativas para escribir y publicar, como emplear metáforas y símbolos o buscar editoriales en otros países.
Añadió que la posibilidad de publicar para escritores ordinarios se ha vuelto casi inalcanzable, a menos que el contenido se ajuste a los intereses gubernamentales.
El autor, conocido por recibir prestigiosos premios literarios, ha asumido la responsabilidad de plasmar la realidad cubana contemporánea en su obra. Sin embargo, ha procurado evitar que su crónica sea exclusivamente política, prefiriendo enfocarse en las dimensiones sociales y humanas de los traumas personales que afectan a la sociedad cubana.
Padura ha enfocado gran parte de su esfuerzo en su serie policíaca protagonizada por el personaje Mario Conde, quien se convierte en un reflejo de la realidad social y los cambios que ha experimentado Cuba desde 1989 hasta 2016.
A través de este personaje, el autor analiza el proceso de envejecimiento y cómo el paso del tiempo moldea a las personas, haciéndolas más cautelosas pero también más decididas a preservar la memoria.
Según sus palabras, las novelas de Mario Conde podrían ofrecer una visión más cercana y veraz del país en comparación con lo que ofrecen los periódicos cubanos.
Con una nueva novela en mente y el compromiso de seguir siendo una voz relevante en el panorama literario, Padura mantiene su misión de capturar la esencia de la sociedad cubana y sus desafíos, aportando así su legado como cronista de una época crucial en la historia de la isla.
