Sin previo aviso, los bancos cubanos de Crédito y Comercio (Bandec) y Popular de Ahorro (BPA) se sumaron desde el 12 de enero pasado al corralito impuesto por el Banco Metropolitano y establecieron límites idénticos a las extracciones y transferencias de dinero.
De acuerdo con un reporte del periódico Invasor, de la central provincia cubana de Ciego de Ávila, esos límites se aplicaban desde febrero de 2022 en las sucursales bancarias, pero ahora se extendieron a las operaciones efectuadas a través de los canales de pago electrónico que realizan las personas naturales.
La oficial de cumplimiento de Bandec, Lisandra Ruiz Palmero, explicó a la fuente que la medida responde al “número cada vez mayor de clientes que operan tarjetas magnéticas, los altos precios y la inflación que vive el país”.
Por su parte, el jefe del departamento de Banca Electrónica de Bandec en Ciego de Ávila, Vladimir Rodríguez, precisó que las personas naturales sólo podrán extraer o transferir hasta 80.000 pesos cubanos al día, y un máximo de hasta 120.000. CUP al mes; mientras que en el caso de la Moneda Libremente Convertible (MLC) el tope diario por operación es de hasta 1.000, y el límite mensual quedó fijado en 5.000 MLC.
Directivos de los bancos implicados aclararon que los clientes que necesiten realizar operaciones por montos superiores a los límites impuestos deberán acudir en persona a las sucursales bancarias y firmar una declaración jurada sobre el origen y destino del dinero.
La medida, que afecta a el movimiento de efectivo entre personas naturales, no sólo ha causado polémica en la isla sino que provocó una corrida bancaria en la capital cubana luego del anuncio del Banco Metropolitano.
El texto publicado en el periódico Invasor cuestionó que los bancos estatales cubanos adoptaran esos límites de forma súbita y sin aviso previo.
“Si algo hay que cuestionar es que a estas alturas la lógica se invierta y decisiones de este tipo primero se implementen y luego se informen. ¿Dónde queda la comunicación y el derecho a la información oportuna?, o, ¿acaso la buena atención al cliente no va también de eso?”, se preguntó el medio de prensa estatal.
