El histórico y acérrimo crítico del gobierno comunista cubano Mauricio Claver-Carone presuntamente dejará su cargo en próximas semanas como enviado especial a Latinoamérica de la administración Trump al cumplirse el plazo sin la confirmación del Senado de acuerdo a filtraciones en la prensa estadounidense.
Ya en La Habana, aún sin la confirmación oficial, han comenzado a sonar los tambores como Laritza Bacallao. «El más reciente movimiento en Washington no le ha sentado muy bien al soberbio Mauricio» escribió uno de los voceros del régimen, Randy Alonso en Cubadebate quien especula sobre discrepancias entre Carone y su compatriota Marco Rubio titular del Departamento de Estado y Consejero Interino de Seguridad Nacional.
De acuerdo al oficialismo cubano las conjeturas se desprenden de las valoraciones de medios estadounidenses y argentinos sobre las causas que han llevado a Carone a filtrar a Bloomberg que deja su cargo para volver a conducir su empresa privada, Lara Fund, un fondo de inversión con sede en Miami. Para eso invocará la Ley de 130 días, que limita que una persona sirva como empleado especial del gobierno federal en Estados Unidos, sin nominación formal del Senado, por esa cantidad de días.
» Mauricio Claver-Carone duró en esta administración lo que un dulce en la puerta de un colegio. Y no lo vamos a llorar por estos lares. Buen hijo de eso mismo que ha sido contra el pueblo cubano. Abur» acotó Alonso, una de los líderes del equipo de regordetes propagandistas del castrismo junto a Arleen Rodríguez Derivet que se hizo célebre al inventar en los años 80 un reportaje sobre un perro que hablaba, según ella, desde su corresponsalía en Guantánamo, recordó un emigrado de Radio Rebelde.
Ambos personajes se afincaron como reproductores ideológicos televisivos y radiales bajo la batuta de Fidel Castro hace 25 años con el drama del balserito Elián González con la conocida «Mesa Redonda». Coincidentemente, otra fuente recordó que por estos días se cumplieron 25 años de un violento encontronazo de diplomáticos cubanos contra manifestantes que pedían que el niño Elián no fuera devuelto a Cuba desde Miami. El hecho ocurrió en las inmediaciones de la sede diplomática de la Isla, en Washington DC, y entre los manifestantes anticastristas se encontraba el joven estudiante Carone.
Claver-Carone, nacido en Miami, de origen cubano, ha sido considerado un “anticastrista de pura cepa” y uno de los artífices del enfoque de máxima presión implementado por la Administración Trump-Pence contra La Habana.
En una entrevista con Político en febrero pasado, Claver-Carone aseguró que la Administración Trump puede “ser muy creativa” en sus medidas contra el Gobierno cubano.
“El Gobierno cubano probablemente se encuentra en su punto más débil. Siempre se dice eso, pero esta vez es así. Y el deseo de cambio del pueblo cubano es abrumador. Incluso su liderazgo sabe que el cambio es inevitable”, dijo.
Durante un conversatorio en el Miami-Dade College a principios de abril, dijo que la Administración estaba siguiendo un enfoque “más quirúrgico para aplicar las sanciones” a Cuba. También habló de utilizar “herramientas más efectivas que las ya previstas en el embargo estadounidense”.
Un mes antes de asumir su segundo mandato,Trump dio una señal de que retomaría las políticas de máxima presión contra los regímenes de izquierda al nombrar enviado especial para América Latina a un veterano halcón de la política exterior, Mauricio Claver-Carone.
De acuerdo a La Nación de Buenos Aires, la versión que el viernes dejó trascender la agencia Bloomberg de que, antes de fin de mes,este funcionario , ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID)- dejaría su cargo no pasó inadvertida ni en Cuba, Estados Unidos ni Argentina país con el que el cubanoamericano tuvo una relación tirante debido a sus críticas personales hacia algunos funcionarios de Javier Milei.
Hasta ahora no se conocen pronunciamientos oficiales de Claver-Carone sobre su eventual salida ni de los congresistas cubanoamericanos ni de Rubio ni de Trump.