El 28 de diciembre de 2024, el Pitbull Stadium de Miami vibró con la energía del reguetonero cubano Oniel Bebeshito, quien debutó en Estados Unidos ante una multitud de 20.000 seguidores. Este evento marcó un hito en su carrera y evidenció su creciente influencia en la escena musical internacional.
Durante una transmisión en vivo, el joven artista confesó que estuvo al borde del llanto, incluso cuando todavía faltaban horas para su concierto. “El día antes estaba sentimental. Yo no suelo llorar, pero iba en el carro y ponían ‘Mi Nombre’ y se me aguaban los ojos”, reveló.
Una vez dentro del estadio, al ver cómo la multitud llenaba el recinto, sus emociones se intensificaron. “Llegué al estadio a las 8 y pico, y afuera había mucha gente porque se atrasó la entrada por problemas de multitud. Cuando subí al balcón donde estaban los artistas y vi el estadio llenarse poco a poco, me asusté. Estaba sentimental, lloraba de alegría. No me lo podía creer”.
“En la prueba de sonido tenía ensayado decir ‘Buenas noches, Miami’, pero cuando llegó el momento, lloré, y al intentar saludar solo dije ‘Mia’. Parecía un niño. Fue una locura”, explicó Bebeshito en su cuenta de Instagram.
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A pesar de los nervios iniciales, una vez en el escenario, Bebeshito logró conectar con su público y disfrutar del momento. “Entré al concierto nervioso, pero a la segunda o tercera canción ya me sentí mejor. Nunca voy a poder explicar todo lo que pasó por mi cabeza ese día”, expresó.
En una publicación más reciente, el cantante publicó un video inédito de su entrada a tarima, vestido con una capa de animal print que hacía referencia a su amigo y colega del género El Taiger, asesinado en un brutal altercado que todavía está bajo investigación policial.
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“Este momento nunca en la vida lo podré olvidar demasiados sentimientos encontrados a la vez, gracias MIAMI”, escribió al pie de las imágenes, donde aparece llorando de emoción mientras se escucha el aplauso ensordecedor de miles de personas.