Un reciente video en redes sociales muestra el miserable almuerzo de unos pioneros en una escuela primaria de Cuba: arroz blanco, pepinos y mango en almíbar. Una presunta maestra filma a los niños que, en su inocencia, muestran entre risas sus bandejas.
El video fue compartido en su cuenta de Instagram por el creador de contenidos Alain Paparazzi Cubano, y aunque no reveló la fuente, a sus seguidores les preocupa tanto la alimentación de la infancia, como el destino de la educadora que los filmó.
Los niños reconocen que no les gusta lo que les han servido de almuerzo, pero dicen que igual se lo comerán porque tienen mucha hambre.
«Mira, esta bandeja a las 4 y 20, ñó… Y me dieron arroz pelao”, protesta una niña, entre las risas de sus compañeritos, que parecen tomarse a broma la desgracia, quizás por la costumbre, quizás por la costumbre, o porque, después de todo, son niños.
La mujer que filma la escena les pregunta si se lo van a comer, y una niña, a todas luces la más despierta del aula, responde: “claro que me lo voy a comer si tengo hambre”. La maestra dice “sean felices… bajando…” y luego susurra un “Dios mío” elocuente.
La precariedad es cada día más notoria en el sistema educativo de Cuba, tanto a nivel docente como de estructura: aparte de las escuelas sin material escolar o con problemas constructivos, también padecen la crisis alimentaria que sufre toda la sociedad.
“Tremenda hambre están pasando esos pioneros en Cuba. Por eso la juventud no cree en ellos”, comenta Alain Paparazzi Cubano, en alusión a quienes llevan las riendas del país, y que insisten en que los acompañan las nuevas generaciones.
De entrada, ninguno de los niños que aparecen en el video tienen sobrepeso, más bien lucen desnutridos, demasiado flacos. Ese “gordo” que solían haber en cada aula de la Cuba de antaño parece haberse extinguido, o quizás emigró.
En los comentarios a la publicación, los usuarios lamentan tanto la situación, como el futuro que le espera a la nación: “Esos niños al final estudian y terminan en un siquiátrico, como se dice en buen cubano, quemao”, escribe un forista.
Otro, que se identifica como José Carrera, comenta con sarcasmo: “Ahí están los logros de la Revolución cubana… Pobres niños que nacen para ser felices”. Una comentarista va más allá y escribe: “Pobre maestra. Después de este video quedará sin empleo”.
A inicios de año se viralizó una imagen de una maestra escribiendo en lo que quedaba de una pizarra, como testimonio del deterioro de las escuelas en Cuba, apenas una parte de lo que parece ser una gran debacle nacional, sin pronóstico halagüeño a la vista.
