Un nuevo cartel publicitario protagonizado por Ana de Armas ha generado una fuerte polémica en Miami.
La valla, situada en el Miami Design District, muestra a la actriz cubana como imagen de la prestigiosa marca de cosméticos Estée Lauder, pero en lugar de elogios, la reacción de la comunidad local ha sido de indignación. El motivo no es solo el rostro de la actriz, sino sus vínculos recientemente «fotografiados», con Manuel Anido Cuesta, hijastro del gobernante cubano Miguel Díaz-Canel.
La publicidad, visible desde la I-195 en dirección a Miami Beach, fue criticada por perfiles en redes sociales como el de Salomé #MirenLasPrisionesDeCuba, quien expresó: «Oye Estée Lauder, a los miamenses no les gusta la gente que se acerca a dictadores comunistas brutales. ¡Será mejor que cambies tu anuncio de campaña!”.
Hey @EsteeLauder @OUTFRONTMEDIAUS Miamians don't like people who cosy up to brutal communist dictators, better change your campaign ad! #AnaDeArmasIsCancelled #SOSCuba pic.twitter.com/JnNZvTfcp2
— Salomé #MirenLasPrisionesDeCuba (@onceagainsalome) November 26, 2024
Además de este perfil, usuarios en plataformas sociales comenzaron a divulgar la ubicación exacta del cartel, exigiendo a la marca reconsiderar su decisión de usar a Ana de Armas como su embajadora en un lugar tan sensible como Miami, donde la comunidad exiliada mantiene un fuerte rechazo hacia el régimen cubano.
La campaña publicitaria también se suma a las críticas contra Ana de Armas por su silencio ante la crisis en Cuba.
A pesar de su fama internacional, su reciente relación con Anido Cuesta ha puesto en entredicho su imagen. Las fotos publicadas por la revista ¡Hola! mostrando a la actriz paseando con Anido en Madrid han indignado aún más a los cubanos en el exilio, quienes consideran su relación una forma de blanquear al régimen de La Habana. En este contexto, la aparición de su imagen en una valla en el corazón de Miami ha sido vista como un insulto directo.
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Rechazo de la comunidad exiliada a Ana de Armas
El rechazo a Ana de Armas no es nuevo, pero ha alcanzado nuevos niveles tras conocerse su romance con Anido Cuesta. Figuras del exilio cubano han alzado sus voces públicamente en más de una ocasión.
Entre ellas está la empresaria e influencer Taty Guiribitey, conocida como «La Mamilover», quien protestó enviando una carta a Louis Vuitton, otra de las marcas que tiene a Ana de Armas como imagen.
En una entrevista con el influencer Alexander Otaola, Guiribitey declaró: “Hasta que no quiten a Ana de Armas como imagen de la marca, conmigo no contarán”. Aunque reconoció que su acción no haría quebrar a la compañía, aseguró que su familia, clienta top de la marca, dejaría de gastar «mucho, mucho, pero mucho» dinero en sus productos.
Otra voz destacada ha sido la de Ana Margarita Martínez, exesposa del espía castrista Juan Pablo Roque, quien afirmó que la relación de Ana de Armas con Anido «confirma su complicidad con el régimen». Martínez, quien ya había criticado a la actriz por su participación en la película Wasp Network, aseguró en sus redes que el romance «repugna profundamente» y demuestra que Ana de Armas «es una de ellos».
El presentador Carlos Otero también se sumó a las críticas con una publicación en sus redes sociales que ironizaba sobre las vacaciones de la actriz en Cuba. «Aquí, cuidando Cayo Santa María», escribió junto a un montaje de Ana de Armas vestida como policía cubana.
Estos rechazos evidencian que el cartel no es solo un anuncio publicitario, sino un símbolo de una disputa mayor entre quienes consideran que Ana de Armas se ha distanciado de los valores de la comunidad exiliada y aquellos que defienden su derecho a mantenerse neutral.