Antes las interrogantes sobre su estilo de vida, Amanda Sánchez, influencer cubana en camino a convertirse en cantante, rompió el silencio. A través de una sesión de preguntas y respuestas en sus historias de Instagram, la joven habló sin rodeos sobre su presente económico, sus planes a corto plazo y, por supuesto, sobre cómo se gana la vida tras separarse del creador de contenido Ultrack (Jorge Batista), padre de sus dos hijas.
Desde que Amanda se sometió recientemente a una cirugía estética en Miami -una transformación que no pasó desapercibida entre sus seguidores- y comenzó a mostrar en redes su nuevo carro y aspiraciones de mudarse de forma definitiva a Miami, muchos se han preguntado cómo puede costear ese nivel de vida.
La cubana, con su estilo directo, despejó las dudas: “Solo estoy trabajando en las redes sociales. Mucha gente cree que esto es la nada, pero no es así. Esto lleva mucho tiempo, mucho trabajo, dedicación y sobre todo, disciplina”, respondió.
Con más de 100 mil seguidores en su cuenta personal de Instagram y 165 mil en su perfil artístico, Amanda es parte de una nueva generación de influencers cubanas que han logrado monetizar su presencia en línea, construyendo marcas personales desde cero, con una mezcla de vida íntima, aspiracional y contenido visual atractivo.
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Y aunque para muchos cubanos el concepto de “vivir de las redes” suena lejano o incluso inalcanzable, lo cierto es que en Miami cada vez es más común ver cómo influencers generan ingresos reales gracias al marketing de contenidos, las colaboraciones pagadas y los patrocinios. Amanda no es la excepción.
En medio del auge de los pódcast, la influencer también dejó entrever que no descarta expandirse hacia ese formato: “Me han estado aconsejando que haga un pódcast, y la idea no me desagrada para nada. Díganme ustedes qué les parece, qué creen. ¿Les gustaría?”, preguntó a sus seguidores, abriendo la puerta a una nueva etapa de su carrera digital.
Pero más allá de los likes y las historias, Amanda tiene planes concretos. Uno de ellos es mudarse definitivamente a Miami, ciudad donde reside Ultrack, y donde, según sus palabras, ya está en plena búsqueda de vivienda: “Ya yo estoy buscando renta en ‘los Miami’. Si alguno de ustedes conoce a algún dueño que rente apartamento o casa, déjenme saber”, comentó.
Y es que, aunque ha logrado “hacerse de sus cositas”, como ella misma dice, sabe que en Miami el proceso de alquilar una vivienda conlleva ciertos requisitos financieros y legales: “Hace poco yo me hice de mis cositas, entonces ahora piden unos cuantos requisitos para rentar. Pero nada, económicamente estoy bien, si no, ni me pasaba por la cabeza la idea de irme a Miami, claro está”, aseguró con firmeza.
