La comunidad migrante del sur de Florida atraviesa un fin de semana en alerta por una oleada de avisos en redes sobre supuestos operativos del ICE en múltiples zonas de Miami-Dade y alrededores. No existe confirmación oficial de un despliegue masivo, pero en hilos de Instagram y comentarios vecinales se multiplican los reportes de avistamientos de agentes y vehículos identificados.
El detonante es una alerta que se vuelve viral la noche del viernes, publicada por @un_martitodurako: “Hay operativos en todo Miami, traten de no salir ok, este fin de semana en general estén tranquilos, que la cosa no está como para ir de party ok. El ICE está en todos lados. Tacto”. A partir de ese mensaje, el flujo de testimonios se acelera y dibuja un mapa de presencias en puntos clave del condado.
Vecinos de Little Havana describen un panorama de vigilancia: “Por la Pequeña Habana no se puede ni salir, hay carros del Border Patrol por todos lados”, afirma una mujer que asegura llevar “dos días encerrada en casa”.
Otros señalan actividad sostenida en arterias céntricas: “en la zona de Flagler y la calle 27 estuvieron parqueados todo el día”, escribe un usuario, mientras otro ubica movimiento “en la 20 NW y la Flagler, donde dicen que el sábado y domingo van a hacer una redada grande”.
También llegan relatos desde áreas comerciales y de ocio. Un trabajador de la construcción sostiene: “Están en los Home Depot, dentro de las camionetas, y salen de sorpresa”. En el corredor de Biscayne Boulevard, otro internauta asegura haber visto “como ocho carros negros frente al restaurante Moshi Moshi, en Biscayne y la 79”, y alguien más apunta que “hoy en el CVS donde fui habían una pila de ellos”.
Los reportes no se limitan a Miami. En Hollywood Beach, residentes describen una escena inusual para la zona: “Hoy los vi por acá, primera vez que veo eso en esta zona”. En paralelo, surgen menciones al Hard Rock Casino y a la Turnpike como lugares con presencia de vehículos oficiales.
La conversación digital combina agradecimientos y angustia. “Gracias por avisar”, se repite en los comentarios, junto a plegarias como “que Dios cuide a nuestra gente trabajadora” y a mensajes que apelan a la empatía: “es triste ver cómo se llevan a personas que solo quieren salir adelante”.
También hay voces que piden bajar el ruido y redactar con mayor claridad: “Si tu escribieras mejor se entendiera el mensaje”, reprocha una seguidora. La respuesta irónica de otro usuario resume el clima de nervios: “Se entendió clarito, toque de queda”.
Mientras tanto, la información verificada es escasa y las autoridades guardan silencio sobre un operativo coordinado. El resultado, de momento, es palpable en la calle: cautela, hogares en alerta y un fin de semana con muchos mirando por la ventana antes de decidir si salen.
