Los restos del cantante, compositor y productor musical cubano Paulo Fernández Gallo, conocido en el mundo de la música como Paulo FG, descansan desde este domingo en el Panteón de la Cultura de la Necrópolis de Colón, en La Habana.
Según precisó en Facebook el Instituto de Información y Comunicación Social de Cuba, el cuerpo del popular artista, fallecido a los 63 años de edad en un trágico accidente automovilístico en el Malecón el sábado, reposa junto a los de los destacados músicos Adalberto Álvarez y José Luis Cortés, El Tosco.
Reportes en redes sociales han recogido momentos de la multitudinaria despedida que músicos, familiares, amigos y seguidores dieron al llamado ‘Sofocador’ de la música cubana.
Desde horas de la mañana decenas de personas se reunieron frente a la funeraria Calzada y K, en El Vedado, esperando a que concluyera la ceremonia familiar privada para decirle adiós al intérprete de éxitos imborrables como ‘Te deseo suerte’ y ‘El bueno soy yo’.
Nacido en La Habana en 1962, Paulito FG descubrió su pasión por la música desde muy joven y posteriormente se convirtió en una de las voces más representativas de la música popular bailable en la isla.
El desafortunado accidente de tránsito que le quitó la vida ocurrió en la céntrica intersección de la calle 12 y la avenida de Malecón, en El Vedado.
Según reportó la prensa oficial, el vehículo del cantante impactó contra un ómnibus de Transtur y, pese a que fue trasladado a un hospital, no pudo ser reanimado.
Hoy, más allá de las críticas que recibió en vida por declarar su admiración por Fidel Castro y su gobierno, los cubanos lo recuerdan como el hombre que “calentaba” a cuanto escenario se subía, fuera en La Habana o en Miami.
La mayoría tiene claro que logró a su paso por destacadas agrupaciones como Adalberto Álvarez y su Son, Opus 13 o Dan Den, y después de crear en los noventa su propia banda, Paulo FG y su Élite, no se lo quita nadie.
