Una asistente de maestra de origen cubano, Marlene Carballo, fue arrestada y despedida del Interamerican Learning Center, una guardería ubicada en el vecindario de Allapattah, Miami, tras ser acusada de maltratar a un niño de seis años. En el incidente, la cubana fue captada por las cámaras de seguridad abusando del menor, y presenciado en el mismo momento que ocurrieron los hechos por una colega.
Carballo, una cubana de 52 años y residente de la Pequeña Habana, Miami, enfrentó a la justicia apenas nueve días después de haber iniciado su empleo en la guardería, tras haber superado los chequeos de antecedentes requeridos.
Las imágenes de seguridad, grabadas antes de la 1:00 p.m., revelan cómo la acusada intenta forzar al menor, diagnosticado con autismo, a permanecer sentado en una silla, presionándolo en repetidas ocasiones por los hombros y dándole toques en la oreja.
La situación escaló rápidamente cuando Carballo tomó al niño por el brazo, lo sentó en el suelo de forma brusca y lo inmovilizó utilizando sus piernas mientras ella permanecía sentada detrás de él. En el video también se observa a la acusada golpeando al menor varias veces con ambas manos y luego forzándolo a golpearse a sí mismo en repetidas ocasiones. Finalmente, Carballo levantó al niño y lo empujó contra un mueble antes de golpearlo nuevamente.
El abuso fue detenido gracias a la intervención de la terapeuta del menor, quien, visiblemente afectada, llevó al niño a la oficina de la directora del centro. Entre lágrimas, la terapeuta pidió el despido inmediato de la cubana y solicitó revisar las grabaciones de seguridad como prueba de lo sucedido. Al revisar el video, la directora procedió a despedir a la asistente y contactó a las autoridades.
La policía de Miami acudió al domicilio de Carballo para arrestarla y trasladarla a la comisaría de Miami, donde la cubana fue interrogada. En un primer momento, la acusada negó las agresiones, argumentando que solo intentaba controlar al menor para evitar que la golpeara. Sin embargo, cuando se le mostró la grabación, finalmente hizo una admisión parcial, aunque el contenido completo de su declaración fue reservado en el informe oficial.
Carballo fue liberada tras pagar una fianza de 3,000 dólares, pero se enfrenta a un cargo por abuso infantil, un delito grave. A su salida del Centro de Corrección Turner Guilford Knight, en Miami, la cubana fue recogida por un hombre que negó las acusaciones, cuestionando la evidencia captada por las cámaras de seguridad.
Por su parte, el Interamerican Learning Center emitió un comunicado lamentando profundamente lo sucedido y asegurando que la seguridad de los niños es su prioridad. La directora del centro destacó que el niño afectado, quien ha asistido al centro desde que era un bebé, ya ha regresado a sus actividades diarias y se encuentra en proceso de recuperación, señala Local 10 News.
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