El puente de Arroyo Seco, en el municipio holguinero de Sagua de Tánamo, colapsó la pasada madrugada debido a las fuertes lluvias, que provocó una súbita crecida del río Mayarí.
El derrumbe del puente cortó las comunicaciones terrestres con seis comunidades de Mayarí y el Segundo Frente, en la vecina provincia de Santiago de Cuba.
Según reportes de Radio Mayarí, el desborde del referido río afecta las zonas bajas e inundó viviendas en la región, cuyos habitantes tuvieron que ser evacuados por las autoridades de la Defensa Civil.
Pocas personas pudieron conciliar el sueño en la noche del viernes al sábado en Sagua de Tánamo y el vecino municipio de Frank País, también conocido como Cayo Mambí, por los aguaceros que pusieron en peligro la seguridad de unos 5.000 pobladores.
Desde Moa tuvieron que acudir efectivos del Cuerpo de Bomberos para contribuir con labores de rescate y salvamento en Sagua, un poblado conocido por sus viviendas sobre pilotes, por las quebradas y el río que atraviesa el pueblo.
El Portal Ciudadano de Sagua de Tánamo informó en su muro de Facebook que las inundaciones afectaban varios asentamientos poblacionales, por lo que 4.660 personas tuvieron que ser evacuadas, algunas de ellas en instituciones públicas y la mayoría en viviendas particulares.
A su vez, el periodista Loidel Gaiza reportó el desborde del río Miraflores, cuyas aguas prácticamente rebasan los perímetros del puente que comunica la finca Camaronera Guajaca con el campismo Playa Mejía.
La reportera local Yudianela Barzaga advirtió en redes sociales que desde la tarde del viernes el río avisó con su rápida crecida que había que actuar para impedir una tragedia.
“El Consejo de Defensa Municipal activado junto a la Defensa Civil acciona para la evacuación de los habitantes de las áreas afectadas y los recursos de entidades. La población se encuentra a salvo y todos los vecinos sagüeros colaboran al tiempo que nos mantenemos alerta ante este evento natural ocasionado por las intensas lluvias”, escribió.
El asunto es que las fuertes precipitaciones, que no tienen que ver con la tormenta tropical Arlene, azotan buena parte del oriente cubano, incluso en la sureña provincia de Granma.
La corresponsal del Canal Caribe en el municipio de Niquero, Inés María Castro, reportó que las lluvias de las últimas horas han ocurrido principalmente en zonas bajas y proclives a inundaciones, y que exigen una vigilancia hidrológica.
Las autoridades monitorean el fenómeno, por la abundancia de comunidades que podrían quedar aisladas si surgen inundaciones.
