Ahora, y unos años después de que su rostro llegara a miles de hogares cubanos, Marín ha compartido un nuevo rumbo profesional relacionado con la actuación.
Este gesto de Giselle González de compartir recuerdos con sus seguidores, muchos de los cuales siguen su carrera desde Cuba hasta Estados Unidos, demuestra el poder de la nostalgia y la importancia de mantener vivos los lazos con el pasado y con la tierra natal.
La fiesta del ICRT en Miami demostró que, aunque físicamente lejos de la isla, el espíritu cubano es indomable y capaz de reunir a su gente en una celebración de amistad y talento donde, efectivamente, "solo faltó el gato".
Desde poco antes de la Nochebuena, madre e hija han compartido sus emocionantes experiencias en el viejo continente a través del perfil de Instagram de la actriz.