Un insólito y violento incidente se vivió recientemente en un vuelo regional con destino a Miami, cuando un pasajero protagonizó una escena que parece sacada de una película de terror. Según documentos judiciales, el hombre atacó a una aeromoza, pateó y golpeó el asiento de otro pasajero, y terminó tragándose un rosario en pleno vuelo.
El episodio ocurrió en un avión operado por Envoy Air, filial regional de American Airlines, que despegó desde Savannah, Georgia, con solo ocho pasajeros a bordo. Apenas iniciado el vuelo, los tripulantes se percataron del comportamiento extraño de uno de los viajeros, quien aparentemente estaba teniendo una «crisis epiléptica», caracterizada por gritos incoherentes, sacudidas y golpes en el piso del avión.
Cuando una de las aeromozas se acercó para intentar calmarlo, el hombre reaccionó violentamente: giró en su asiento y le propinó una patada en el pecho, haciendo que la asistente de vuelo cayera contra una ventana en el lado opuesto del pasillo. No contento con eso, el agresor comenzó a patear y golpear el asiento de otro pasajero, quien logró moverse a tiempo antes de que el respaldo se desplomara.
Los pilotos decidieron regresar al aeropuerto de Savannah para controlar la situación, señala Local 10 News. Tras el aterrizaje, el hombre intentó abalanzarse hacia la salida, lanzando puñetazos a otra aeromoza antes de que otros pasajeros lograran reducirlo. Finalmente fue detenido por la policía aeroportuaria y trasladado a un hospital local, donde se descubrió que había ingerido un rosario.
La hermana del agresor explicó posteriormente que ambos estaban viajando a Haití «para huir de ataques religiosos de carácter espiritual». Según declaró la mujer, antes del violento arrebato, su hermano le había pedido que «cerrara los ojos y rezara, porque los discípulos de Satanás los habían seguido hasta el avión». Además, justificó que él se había tragado el rosario porque lo consideraba «un arma de fuerza en la guerra espiritual».
El hombre fue finalmente encarcelado en el condado de Chatham y enfrenta cargos por agresión, obstrucción a la policía y daños criminales graves. También se le imputa un cargo federal por interferir con la tripulación del vuelo, un delito considerado muy serio en el ámbito aéreo estadounidense.
El caso ha generado todo tipo de reacciones en redes sociales, con muchos usuarios cuestionando cómo una persona en aparente estado de alteración mental logró abordar el avión sin que nadie notara su conducta previa. Mientras tanto, el personal de la aerolínea agradeció que, pese al caos vivido en el vuelo, nadie resultó gravemente herido, ni siquiera la aeromoza.
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