La situación descrita en las denuncias hechas por cubanos en las redes sociales, con relación a hechos acontecidos en dos hospitales de La Habana, Cuba, es realmente grave y preocupante. Estos cubanos dejan muy mal parada a la «Potencia Médica», y a un gobierno que todavía, insiste, en exportar su sistema de salud al mundo.
Según una de las denuncias realizadas por estos cubanos, una mujer se quejó a través de un grupo en redes sociales, sobre la atención médica en el hospital militar de Marianao. Según dijo, esta atención dejó mucho que desear cuando una persona víctima de un accidente vial llegó en condiciones críticas al centro, y comenzó así una odisea para que le brindaran atención al accidentado.
La testimoniante revela que el señor se encontraba en el peor estado posible, con la mandíbula completamente desprendida, y pese a la urgencia de la situación, no había ni analgésicos para aliviar su dolor. Por si fuera poco, el médico jefe de guardia y el especialista maxilofacial no estaban presentes. El segundo tuvo que ser llamado por teléfono, y se apareció horas después.
El colmo de los absurdos en este hospital de la «potencia médica» no comenzó ahí, sino cuando al esposo de la denunciante, que fue uno de los que trajo al herido al hospital, le negaron la entrada al centro porque llevaba puesto un short, y no un pantalón. La denunciante expresó su indignación ante esta falta de consideración y respeto por la vida humana.
Finalmente se apareció un médico, que en muy mala forma le reprochó que si ella no tenía relación de parentesco con el herido, por lo tanto, no tenía derecho a reclamar. Según expresó, ella fue tratada con despotismo y grosería por parte del galeno.
La mujer criticó además del trato deplorable que recibieron tanto ella como el herido y su esposo, la falta de higiene en el centro. En su post, hizo un llamado a las autoridades municipales, provinciales y del Ministerio de Salud Pública a tomar medidas para garantizar una atención digna y de calidad en los hospitales, ya que la salud pública es un derecho de todos los ciudadanos.
por más experiencia y menos víctimas!
Decenas de internautas reaccionaron a la crítica, y comentaron que lo expuesto sucede, con matices variopintos en otros hospitales y centros de salud en todo el país, lo cual dista mucho de ser la imagen ideal que pregona por el mundo el gobierno que insiste en llamar a su sistema de salud una «Potencia Médica».
Sin embargo, no pocos argumentaron a que en el extranjero el tratamiento de los médicos cambia.
«Después los mandan para otros países a esos mismos médicos y son ositos cariñositos (…),» dijo uno de los internautas.
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