Icónica, legendaria, magnífica. Esos son solo algunos de los adjetivos que dominan los titulares alrededor del mundo al anunciar la lamentable noticia del fallecimiento de la actriz británica Maggie Smith.
La familia fue la encargada de dar a conocer el suceso mediante un comunicado compartido por varios medios, como la BBC, donde se leía: “Falleció pacíficamente en el hospital a primera hora de esta mañana, viernes 27 de septiembre. Era una persona muy reservada, y estuvo con amigos y familiares en el final. Deja dos hijos y cinco nietos cariñosos que están devastados por la pérdida de su extraordinaria madre y abuela”.
Dos de sus roles más conocidos podrían ser el de la profesora McGonagall en la famosa saga de películas de Harry Potter, o el de Violet Crawley en la serie británica de época “Downton Abbey”.
Y no es para menos. En la red social X, se pueden leer mensajes de varios fanáticos de las películas basadas en los libros de J. K. Rowling, que piden alzar sus varitas por una de las mejores profesoras y jefas de casa de Hogwarts.
Sin embargo, estos no fueron los únicos papeles que consolidaron a Smith como una leyenda del cine y del teatro británico. Con una carrera que la llevó a ganar dos premios Oscar, siete BAFTA, tres Globos de Oro, tres Emmy, un Tony y un SAG, su legado es incuestionable.
Smith continuó actuando hasta sus últimos momentos, protagonizando en 2023 la película irlandesa “El club de los milagros” y, un año antes, la segunda película basada en Downton Abbey, titulada “Una nueva era”.
Desde su debut en la gran pantalla en 1956 con “Child in the House”, su filmografía no ha hecho más que expandirse, incluyendo títulos como “California Suite”, “Una habitación con vistas”, “La última primavera”, “Keeping Mum”, “Becoming Jane”, “El exótico Hotel Marigold”, entre muchas otras.
Asimismo, durante todos estos años, nunca abandonó el teatro, donde interpretó numerosas obras de Shakespeare y clásicos como “La importancia de llamarse Ernesto”.
