La aerolínea mexicana Magnicharters suspendió con más de un mes de antelación sus operaciones entre Cuba y Nicaragua, cuya cancelación de los seis vuelos semanales con este destino había sido previamente programada para el próximo 30 de junio.
En una nota oficial de la compañía, difundida por la Empresa Cubana de Aeropuertos y Servicios Aeroportuarios S.A (ECASA) en sus redes sociales, Magnicharters comunica que “por motivos de causa de fuerza mayor y ajenos a nuestra empresa y a nuestro tour operador, hemos tenido que cancelar los vuelos a Managua”, e informa “a la opinión pública y a nuestros usuarios que el dinero de los boletos ha sido regresado a las agencias de viajes a manera en que los pasajeros puedan solicitar su reembolso, cabe hacer notar que tanto a la tour operadora como a la aerolínea nos apena mucho lo que ha ocurrido”, remarca el Capitán Jorge Luis Badía Muñoz, Director de Operaciones del Grupo Aéreo Monterrey, S.A de C.V. (Magnicharters), quien firma el texto.
ECASA tuiteó la información y refrendó que “se han suspendido los vuelos de conexión hacia Nicaragua”, pues las rutas de esta aerolínea comprendía una escala en México con destino final en Managua” y “todos los pasajeros deben contactar con sus agencias para el reembolso de su boleto. Se mantiene operando la ruta Cuba-México”.
A inicios del pasado mes de abril, la compañía Viva Aerobús, también de México, suspendió sorpresivamente sus vuelos entre Cuba y Nicaragua, a donde los naturales de la isla pueden viajar con libre visado desde noviembre de 2021, y Magnicharters anunció igualmente la suspensión de sus vuelos pero de una manera menos súbita, fijando la fecha para el 30 de junio de este año.
Sus responsables refrendaron entonces que hasta ese momento no habría cancelaciones en sus vuelos programados, y los turoperadores mexicanos relacionados con Magnicharters, como Viajes Bojórquez, continuaron promocionando ofertas de vuelo a La Habana durante la Semana Santa.
Poco tiempo antes de estas decisiones, transcurrió la XV ronda de conversaciones sobre el tema migratorio entre los gobiernos de Cuba y México, en la que ambas partes se comprometieron a “garantizar un flujo de viajeros regular, ordenado y seguro”, y ahora la aceleración de la decisión de Magnicharters sucede tras la “causa mayor” que resultó visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Cuba, uno de cuyos principales temas de conversación con las autoridades de la isla fue sin dudas el tema migratorio, que en el último año ha alcanzado cotas históricas, sumando decenas de miles de cubanos que cada mes buscan cruzar la frontera entre México y Estados Unidos, la mayoría proveniente de Nicaragua.
