El régimen cubano prosigue con su ola represiva y sus detenciones arbitrarias. Parecen desdeñar la lucha de muchas madres cubanas
Pese a la escalada represiva en la isla, a las madres cubanas no hay quien las silencie. Josefa Lavastida, la madre del artista cubano Hamlet Lavastida -encarcelado en Villa Marista por el régimen desde el pasado 26 de junio- ha publicado en su perfil de Facebook la misiva que ha escrito a Miguel Díaz-Canel.
Se dirige a él como Presidente de la República de Cuba, y le dice: «hace unos días escuché sus palabras, que el agotamiento no nos rinda. Soy tecnóloga de salud, Especialidad Laboratorio Clínico, llevo 39 años en el sector, internacionalista, etc. Imaginar lo duro de estos últimos dos años de trabajo de mi vida, mi hijo por Europa estudiando Arte ,el otro con su abuela.Ahora Hamlet preso en Villa Marista desde el 26 de junio de 2021… vino a verme a su país y aún no ha podido recibir los rayos de sol de su Cuba, la nuestra, la de todos piensen como piensen y lo expresen».
La mezquindad de quienes deciden los destinos -su obcecación con aferrarse al poder- parece no contar con que para los nacidos la familia es un pilar, y las madres cubanas jamás, da igual el miedo que siembren, dejarán de pedir por sus hijos.
Agrega Josefa Lavastida en su carta al gobernante: «Quieren que todos, lo mejor de nosotros, nuestro sacrificio y esfuerzos. Me parece que deben ser más consecuentes ustedes también, quizás muchos jóvenes tengan una madre como yo que trabaja muchísimo para su patria, no merece tantas lágrimas por sus hijos, por esos cargos absurdos y procesos de investigación larguísimos algunas veces no justificados, miren sus procederes como seres humanos todos nos equivocamos y después es muy tarde para subsanar grandes errores».
En otro post de ayer mismo, en el que comparte además una foto de Hamlet, Josefa expresa: «Como me duele Cuba lo que estas haciendo con tus hijos!!!»
El pasado lunes, aunque la policía política impidió en muchos casos la llegada al lugar de colegas de la prensa independiente, otras madres cubanas se plantaron frente al Tribunal Provincial de La Habana porque siguen sin saber de sus hijos. Así lo narraba Héctor Valdés Cocho, de ADNCuba.
En un artículo aparecido en El Estornudo el pasado 23 de junio, Inés Casal, la madre de Julio Llópiz Casal -uno de los jóvenes del 27N, narraba detalles de la detención de su hijo en 2005. Pasaba entonces Llópiz Casal la noche en un calabozo de la Unidad Provincial de la PNR (Zapata y C, El Vedado).
Inés posteriormente pidió explicaciones a oficiales de la policía, y concluía:
«Me parece que no estoy aquí, frente a una persona tan ignorante y arrogante (dos características letales cuando van de la mano) y que es, además, un alto funcionario de la Policía Nacional Revolucionaria. Me siento como si estuviera en un teatro o en un cine, viendo una obra o una película, que tiene un guion y una trama que ya está escrita y cuyo desenlace no depende de mí. Entonces comprendo que lo más importante ya lo sé: que nunca, jamás, se podrá hacer entrar en razones a un represor que cumple las órdenes de otros represores y que, al final, no tiene ni cerebro, ni sentimientos para cuestionarse nada de lo que le indiquen hacer».
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