El compositor y cantante cubano Lenier Mesa reveló nuevos detalles del tenso momento que atravesó durante su último viaje a Cuba, país al que regresó en agosto de 2023 para acompañar a su colaborador, el rapero estadounidense Tekashi 6ix9ine, en su presentación en el Santa María Music Fest.
En una entrevista ofrecida al programa de YouTube dirigido por el influencer Un Martí To Durako, Lenier Mesa explicó que su llegada estuvo marcada desde el inicio por restricciones de las autoridades cubanas, quienes le prohibieron realizar cualquier tipo de presentación artística.
Lenier Mesa relató que fue detenido en el aeropuerto y sometido a interrogatorios. Según sus palabras, los oficiales le informaron que no podría cantar ni realizar actividades públicas en la isla. “Cuando llegué, me dijeron: ‘Usted aquí no puede hablar ni salir del cuarto donde se quedará. No es bienvenido y no tiene permitido presentarse en este país’”, contó.
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El artista también recibió acusaciones de haber ofendido al mandatario cubano Miguel Díaz-Canel en ocasiones anteriores.
La visita de Lenier y Tekashi 6ix9ine fue polémica desde el principio. Por un lado, la presencia del rapero estadounidense, conocido por sus escándalos legales y su estilo provocador, generó reacciones mixtas entre los cubanos.
Tekashi filmó un video musical en barrios populares de La Habana, proyectando imágenes de una Cuba vibrante y colorida. Sin embargo, muchos criticaron esta representación como un intento de lavar la imagen del gobierno cubano, al ignorar las dificultades cotidianas que enfrenta la población.
Lenier, en particular, fue objeto de críticas por acompañar a Tekashi en este proyecto, lo que algunos consideraron una falta de sensibilidad hacia el sufrimiento del pueblo cubano. Los detractores argumentaron que la colaboración con el controvertido rapero podría ser vista como una forma de legitimar las acciones del régimen, mientras que otros defendieron a Mesa, destacando que su música siempre ha sido un llamado a la libertad y la unión.
Lenier no dio detalles sobre el propósito original de su viaje, pero expresó su frustración por no poder compartir su arte en su propio país. “Es un dolor muy grande que te hagan sentir como un extranjero en la tierra donde naciste”, lamentó. Esta experiencia subraya la tensión constante entre el gobierno cubano y los artistas que abogan por mayores libertades.