El reconocido trompetista y cantante cubano Alexander Abreu, en colaboración con el reguetonero Velito el Bufón, ha lanzado una canción cargada de mensajes sociales, titulada «Mi barrio». Esta nueva pieza no solo denuncia la realidad de muchos barrios en Cuba, sino que también muestra las duras condiciones que enfrentan los habitantes, desde la pobreza hasta la violencia, todo plasmado de manera cruda en su letra y su video.
La canción comienza con un contundente verso: «Qué difícil se ha vuelto mi barrio donde los buenos pasan trabajo, donde los malos lo consiguen todo, donde la humildad no vale ni un carajo». Con estas palabras, Abreu y Velito exponen la falta de oportunidades y el deterioro social que afecta a muchos cubanos. Se retrata un ambiente en el que los esfuerzos de las personas decentes no son recompensados, mientras que los más inescrupulosos obtienen todo lo que quieren.
El video que acompaña la canción es igual de potente. Las imágenes de La Habana muestran la arquitectura en ruinas, edificios deteriorados que sirven como un reflejo visual de la decadencia social que se ha apoderado de muchos barrios. En estas calles, donde deambulan personas sin rumbo, la pobreza extrema es evidente. Según informes recientes, casi el 90% de la población cubana vive en condiciones de pobreza, y este video no hace más que confirmar esa alarmante cifra.
Además de la arquitectura, la canción aborda otros problemas sociales, como el desempleo, que lleva a muchos a vivir sin rumbo, sin objetivos claros. Abreu también hace referencia a la descomposición familiar, mencionando cómo las mujeres «enganchan con barriga» (embarazo precoz) y los hombres «caen», en referencia a las dificultades que enfrentan para mantenerse en pie ante un sistema que no les ofrece soluciones. El alcoholismo y la mendicidad también están presentes en las imágenes, haciendo hincapié en los efectos destructivos de la pobreza prolongada.
En un verso particularmente impactante, Abreu canta: «Las madres llorando por sus hijos, y otros que se llevan como el agua y el vinagre». Aquí, se menciona el dolor de la orfandad y el sufrimiento de las madres que pierden a sus hijos, víctimas de la violencia y la falta de oportunidades. Este tipo de tragedias es recurrente en los barrios más desfavorecidos, donde la vida se ha vuelto tan difícil que muchos jóvenes optan por caminos peligrosos, con frecuencia cayendo en el consumo de drogas o involucrándose en actividades delictivas.
Uno de los estribillos más poderosos de la canción repite: «Arde, arde, mi barrio está que arde, están perdiendo los valientes, están ganando los cobardes». Este fragmento refleja el sentimiento de desesperanza que impregna el barrio, donde los valores como la honestidad y el coraje son desplazados por la violencia y la falta de ética. Los jóvenes, en vez de enfocarse en sus estudios, se ven cada vez más desvinculados del sistema educativo, lo que contribuye al deterioro de la calidad de vida y la disminución de la esperanza de vida.
El video también toca temas como la crisis alimentaria y el deterioro de los valores tradicionales. A medida que la pobreza y la desesperación se hacen más visibles, la mortalidad temprana se convierte en una realidad cada vez más común en los barrios cubanos. La falta de educación formal y de oportunidades de trabajo estable sigue siendo un factor determinante en la vida de estos jóvenes, quienes muchas veces no tienen más opciones que caer en ciclos de violencia y decadencia.
En resumen, «Mi barrio» es una obra profundamente crítica que utiliza tanto la lírica como las imágenes visuales para ofrecer una denuncia contundente sobre la realidad de los barrios cubanos.
Abreu y Velito no solo han creado una canción pegajosa, sino también un grito de auxilio que busca llamar la atención sobre los problemas estructurales que enfrenta la isla.
Con más de 115,000 visualizaciones en YouTube a solo dos días de su estreno, este tema es un claro reflejo de cómo la música puede convertirse en una herramienta poderosa para el cambio social y la denuncia, algo que Abreu siempre ha dejado caer de una manera u otra, o sino, ¿cómo puede entenderse su tema Pasaporte, sino como una crítica al éxodo migratorio de los cubanos?
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