La judoca cubana Dayle Ojeda decidió quedarse en París después de cumplir con la función de Uke, o sea, ayudante, de la primera figura de la división de +78 kg, Idalis Ortiz, con vista a los Juegos Olímpicos.
Según informó el sitio Cubalite, tras concluir la preparación de Ortiz, en cuyo entrenamiento Ojeda colaboraba, la judoca oriunda de La Habana determinó abandonar el concentrado y no regresar a la isla junto a otros judocas con su mismo rol.
De esta manera, Ojeda, que el mes próximo cumplirá 31 años, se suma a la larga lista de atletas cubanos que han desertado en 2024.
La capitalina fue medallista de plata en el Abierto Panamericano de Varadero en 2023 y 2024, las dos veces derrotada por su coterránea Naomis Elizarde.
Ojeda también intervino en el Campeonato Panamericano de 2017, donde cedió en la lucha por el bronce ante la estadounidense Nina Cutro-Kelly.
Vale recordar que Cuba asiste a los Juegos Olímpicos con cuatro representantes en el judo: los matanceros Iván Felipe Silva y Andy Granda, la santiaguera Maylín del Toro y la artemiseña Ortiz.
El también yumurino Magdiel Estrada, que tenía posibilidades de competir bajo los cinco aros, abandonó la delegación cubana en el Campeonato Panamericano y de Oceanía de este año, en Brasil.
Asimismo, a finales de mayo, durante la gira por el Europa después del Campeonato Mundial de Abu Dabi, la espirituana Mairelys Inojosa Polanco abandonó el equipo en el Viejo Continente.
En estas olimpiadas dos judocas cubanas competirán bajo otra bandera: una lo hará por Estados Unidos, y otra por Canadá.
El éxodo de deportistas cubanos se ha incrementado en los últimos años en medio de una crisis profunda en la isla.
Al menos 21 atletas de la isla competirán en representación de otros países en los Olimpícos de París.