El gobierno cubano no le ha quitado el veto a la famosa cantante Celia Cruz que ha impuesto durante mas de cinco décadas. Su música no se refleja habitualmente ni en la radio ni en a televisión y apenas se menciona en otros medios de prensa, lo que se mantiene incluso cuando varios de los principales medios de habla hispana honran el legado de la artista cuando se cumplen 20 años de su fallecimiento el próximo 16 de julio.
La censura que pesa sobre Celia Cruz por parte del gobierno de la isla ha sido repudiada internacionalmente por artistas en el exilio, por su albacea, el laureado productor Omer Pardillo y por otros músicos que residen en la isla, pero nada ha logrado cambiar la férrea muralla que impide que sus canciones se escuchen en los medios oficiales cubanos. Inclusive se han contado despedidos o sanciones entre los conductores y locutores cubanos que se han atrevido a divulgarlas.
Nacida en La Habana en 1925, Celia Cruz abandona la isla poco después del triunfo de la revolución en un viaje de trabajo hacia México con la Sonora Matancera. En medio de su éxito internacional la cantante luego se radica en Estados Unidos donde se convirtió en uno de los principales símbolos de la comunidad latina y en una de las cantantes cubanas más famosas de todos los tiempos.
Cuando murió su madre el gobierno de Fidel Castro le impidió viajar a su funeral, lo que provocó una ola de indignación e incrementó el repudio de Celia al sistema político comunista. Lo más cerca que estuvo de su gente en Cuba fue cuando visitó la Base Naval de Guantánamo en la década de 1990, viaje en el que recogió un poco de tierra cubana del otro lado de la reja que separa la isla de la instalación estadounidense y se la llevó consigo hacia Estados Unidos.
Celia murió en 2003 y le depositaron encima de su féretro la tierra que conservó de su país natal. En Estados Unidos existe una estrella con su nombre en el Paseo de la Fama de Hollywood y en Nueva York también una calle honra la memoria de la «Guarachera de Cuba».
Pese a los cientos de homenajes a nivel mundial, el gobierno cubano sigue haciendo silencio sobre su obra cuando se cumple 20 aniversario de la muerte de una cantante representativa de la mejor música cubana a escala global.
