Celia Cruz ha sido históricamente censurada en los medios oficiales cubanos por su posición contraria al régimen comunista, una posición que se radicalizo cuando el gobierno de Fidel Castro le impidió viajar a la isla para asistir al sepelio de su madre.
“Me gustaría darle las gracias a la Reina de la Salsa, mi madrina, Celia Cruz. Yo sé que desde el cielo ella se siente orgullosa de mí. Le dedico esto a ella”, dijo la cantante en su discurso.
Albita, con su carrera y su voz, se erige como un símbolo de resistencia cultural y un puente entre Cuba y su diáspora, manteniendo viva la esencia de la música cubana en el corazón de muchos.
Dos leyendas cubanas inmortalizadas en un solo instante: así podría describirse la imagen compartida en las historias de la cantante cubana, Lena Burke.
“Nuestras elecciones tenían que ajustarse realmente a la definición de una gran canción pop: Pegadiza, con gancho, bellamente elaborada, letra convincente, universalmente atractiva, innovadora...”.