La actriz y empresaria Gwyneth Paltrow ha vuelto a estar en el centro de la polémica tras defender con firmeza —y algo de exabrupto— su controvertida vela con aroma a “su vagina”, lanzada en 2020 bajo su marca Goop. El producto, llamado “This Smells Like My Vagina” y que inicialmente costaba 75 dólares, ha sido blanco de críticas desde su aparición. Sin embargo, Paltrow no solo no se arrepiente: ha salido al paso de los comentarios negativos con un categórico “go f** yourself*” (váyanse a la m…).
Durante su participación en el Mindvalley Manifesting Summit 2025, en Los Ángeles, la actriz de 52 años explicó que la idea surgió como una broma cuando experimentaba con fragancias junto al perfumista Douglas Little.
“Estábamos jugando con distintos aromas y dije: ‘Oh, esto huele como… ya saben’. Y él respondió: ‘Deberíamos hacer una vela con eso’. Todo era en broma, pero de repente ya estaba en el sitio web. Y rompimos internet”, recordó.
El producto, que contenía notas de geranio, bergamota cítrica, cedro, rosa damascena y semilla de ambreta, fue discontinuado, aunque actualmente puede encontrarse en sitios de reventa por hasta 400 dólares.
Pero más allá del escándalo y las burlas, Paltrow aseguró que mantuvo la vela a la venta porque representa un “mensaje punk” y una declaración sobre la sexualidad femenina.
“Nos han socializado para sentir vergüenza de nuestra sexualidad. Esto era una forma de decir: somos bellas, somos increíbles y váyanse a la mierda”, afirmó entre aplausos del público.
No obstante, el camino no fue todo rosas. En 2021, un cliente en Texas demandó a la empresa por 5 millones de dólares, alegando que la vela explotó tras tres horas de uso. Un incidente similar se reportó en el Reino Unido, lo que añadió combustible al fuego de las críticas.
Paltrow ha ampliado su línea con fragancias igualmente provocadoras, como “This Smells Like My Orgasm”, “This Smells Like My Prenup” y “Hands Off My Vagina”, esta última lanzada en 2022 para apoyar a la ACLU en la lucha por los derechos reproductivos, tras el revés legal a Roe v. Wade.
Con hijos ya adultos y una carrera marcada por su irreverencia, la ganadora del Óscar parece disfrutar su rol como empresaria disruptiva. “Al principio todos se escandalizan, pero cuando entiendes lo que hay detrás, hasta resulta genial”, concluyó.
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