A más de 4 años de su apertura, con una variedad de productos inexistentes en otros establecimientos comerciales, las tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC), sufren un profundo desabastecimiento que parece podría continuar en los próximos meses.
En un recorrido por diversas instalaciones de este tipo Cuballama confirmó lo que está en boca de muchos habanero: las tiendas en MLC van en una carrera cuesta abajo, un declive marcado por estantes vacíos, los mismos productos repetidos en fila, y una visible ausencia de clientes.
Si bien en sus inicios era relativamente fácil adquirir alimentos como queso gouda, yogurt, carne, pescados o confituras, ya este tipo de oferta brilla por su ausencia entre los productos que se venden en esta red de tiendas.
“La carne de res se la llevaron las Mipymes junto a todo lo demás”; dice medio en broma, medio en serio, un empleado de la tienda ubicada en 3 y 70 mientras fuma un cigarrillo de una caja H- Upmann.
El panorama es prácticamente el mismo en todas las instalaciones visitadas por Cuballama. Clientes molestos porque no aparecen los productos que fueron a comprar e hileras vacías que por el polvo que acumulan parecen estar así hace varios meses.
En 2022, Alejandro Gil, ministro de Economía, indicó que “de no haber existido las tiendas en monedas libremente convertibles (MLC) la situación económica del país sería más compleja aún”. Añadió además que las ventas en MLC se habían usado más de 300 millones de dólares para abastecer de mercancías la red del comercio en moneda nacional y que la entrada en vigor de esos establecimientos era una medida de “ justicia social”.
Lo cierto es que muchos cubanos se cuestionaron la apertura de estas tiendas que después de 4 años no solo muestran un panorama desolador, sino que parecen no haber cumplido ni por asomo la función con la que presuntamente fueron creadas.
El gobierno no ha podido garantizar a los cubanos los productos básicos en las llamadas bodegas u otras tiendas en CUP, los cuales, por otro lado se venden a precios desorbitantes en las llamadas Mipymes, un panorama que refleja la grave crisis económica de un país que ha tocado fondo.
