El cubano Yefery Rodríguez Ramos, quien había sido reportado como desparecido en Tapachula, en la frontera de México con Guatemala, fue encontrado en un hospital.
Según detalló en su cuenta de Facebook el periodista Mario Pentón, quien había pedido ayuda a nombre de la familia de Yefery para hallarlo, otros cubanos salieron a buscarlo y lo encontraron en la instalación médica.
De acuerdo con varios reportes en redes sociales, Yefery, de quien no se sabía desde el lunes, sufrió un accidente al caerse por unas escaleras y fue trasladado por unos paramédicos a Escuintla, ciudad cercana a Tapachula, pero “gracias a Dios ya está bien”.
Asimismo, el conocido comunicador agradeció a sus seguidores por “sus buenos deseos” y por contribuir a difundir la noticia.
A juzgar por los comentarios que le han dedicado cientos de internautas, Yefery sería un migrante que intenta llegar a Estados Unidos “en busca de un futuro mejor”.
El caso de este cubano accidentado ha hecho que muchos usuarios se sensibilicen con los miles de migrantes que “andan en travesía”, así como con sus familias, que permanecen “desesperadas”, mientras ellos atraviesan de forma irregular varios países.
Cabe recordar que son muchos los cubanos que han sido secuestrados en México mientras esperan (en muchos casos durante meses) una cita de CBP One para solicitar asilo en la frontera sur de Estados Unidos.
Así ocurrió a finales de junio con tres cubanos que fueron secuestrados en el estado de Nuevo Laredo, en Tamaulipas, mientras se dirigían al encuentro con las autoridades estadounidenses.
Una fuente de la Secretaría de Seguridad Pública del estado mexicano declaró entonces a 14ymedio que dicha zona es “caliente” para los extranjeros, quienes “son una presa fácil” para el Cártel del Noreste, una ramificación de los Zetas, que opera desde hace años en la franja fronteriza.
La Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos denunció en abril de este año que el delito de secuestro de migrantes y solicitantes de asilo ha alcanzado “niveles intolerables en la frontera entre Texas y Tamaulipas”.
En Nuevo Laredo, los secuestros son tan prevalentes que se conocen informalmente como “pasar por la oficina de cobro”, apunta el informe.
