El panorama de la tasa de cambio en Cuba se asemeja a un cachumbambé, con subidas y bajadas constantes que reflejan la volatilidad del mercado informal. A lo largo de los últimos días, esta inestabilidad ha sido notable, especialmente en el comportamiento del euro, el dólar estadounidense (USD) y la Moneda Libremente Convertible (MLC).
El 30 de julio, el euro experimentó su tercer día consecutivo de aumento, alcanzando los 345 CUP, cinco pesos más que el día anterior. Sin embargo, esta cifra aún está lejos del récord de 402.5 pesos registrado el 10 de mayo. En contraste, el dólar y la MLC permanecieron sin cambios, con valores de 335 CUP y 280 CUP, respectivamente.
Este ascenso del euro y la estabilidad del dólar y la MLC siguieron una tendencia que se había observado desde mediados de julio, tras una racha de descenso que duró casi un mes. Muchos cubanos en redes sociales han atribuido estas fluctuaciones a las recientes medidas económicas del gobierno, que incluyen el retorno al pago en efectivo con divisas en algunos servicios. El primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, ha reconocido que establecer una nueva tasa de cambio oficial es complejo y que podría provocar una devaluación del peso, impactando negativamente en la inflación, los precios y los salarios.
El 31 de julio, las divisas amanecieron sin cambios. El dólar continuó tasado en 335 CUP, el euro en 345 CUP, y la MLC en 280 CUP. Este estancamiento en los valores de las divisas dio un respiro al mercado, tras días de incrementos paulatinos de cinco en cinco pesos, una tendencia más moderada comparada con los aumentos abruptos de 20 y 30 pesos observados en abril y mayo.
Sin embargo, el 1 de agosto trajo nuevas fluctuaciones. Tanto el dólar como el euro cayeron cinco pesos, con el primero tasado en 330 CUP y el segundo en 340 CUP. La MLC, por su parte, mantuvo su valor de 280 CUP. Esta ligera caída se produjo después de un día de calma en el mercado, lo que subraya la naturaleza impredecible del mercado informal cubano.
Las constantes fluctuaciones en las tasas de cambio reflejan la incertidumbre económica en Cuba y el impacto de las medidas gubernamentales. Aunque se han visto incrementos en las tasas, la volatilidad sigue siendo una característica dominante, con cambios casi diarios en los valores de las divisas. Este comportamiento errático dificulta la planificación económica tanto para individuos como para negocios, y subraya la necesidad de una estrategia más estable y predecible para manejar la economía de la isla.
tomado de Tasa de Cambio de El Toque
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