Dany Ome, uno de los rostros más carismáticos del reguetón cubano, encendió las redes con una historia de Instagram que no dejó a nadie indiferente. Con el torso al aire, mirada desafiante y una sonrisa que mezcla picardía y orgullo, el artista de 24 años mostró su impactante cambio físico tras deshacerse de 30 libras (unos 13 kilos y medio). Y lo hizo, como siempre, con ese estilo directo que lo caracteriza.
“La forma más natural de bajar tu perra gordura, te lo digo yo, que llevo 30 libras menos”, soltó sin filtros, al tiempo que etiquetaba al centro de bienestar que lo ha acompañado en esta metamorfosis.
En el video que acompañó la publicación, Dany mantuvo su habitual sentido del humor y no se guardó nada: “Otra cosita. Vamos a darle un break para después quitarnos la grasa esta”. Con su tono juguetón, el cantante dejó claro que este cambio no solo es físico, sino también emocional. Y, como buen showman, promete más sorpresas a futuro.
Lo cierto es que sus seguidores ya venían sospechando algo. Desde hace semanas, en cada nuevo post o clip musical, el cambio se volvía más evidente. Para quienes siguen la carrera de Dany desde sus inicios junto a Kevincito El 13, saben que su autenticidad ha sido su mejor carta. Pero también ha tenido que lidiar con un ejército de haters que no siempre fueron amables con su físico.
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Aunque él solía reírse de las críticas, hace apenas unos meses tomó una decisión que cambiaría su vida: en julio de 2024 se sometió a un bypass gástrico, una cirugía que, según confesó, lo ayudaría a bajar de peso con más facilidad.
En uno de sus videos dentro de la clínica, se le escucha decir: “Búsquenme un defecto nuevo, ahora me voy a poner Triple M”. Y, como si no fuera suficiente, remató con otra frase marca registrada: “¿Te acuerdas de que te cantamos ‘Tienes que pagar pa’ verla’? Ahora voy a hacer una que diga ‘Obligao vas a pagarme’”.
El cambio físico es evidente, pero también lo es el cambio de actitud. Dany Ome no está simplemente más delgado: se lo ve más enfocado, con una energía distinta, como si se hubiera quitado de encima no solo kilos, sino también inseguridades. Y eso, en un mundo como el de la música urbana, donde la imagen pesa tanto como el talento, es un paso gigante.
Padre de dos hijos y figura querida en la escena cubana, Dany está construyendo una nueva etapa en su vida, más saludable, pero sin perder esa chispa que lo hace único. Sus fans lo celebran, lo animan y, sobre todo, lo aplauden por mostrar su proceso sin filtros ni poses de gimnasio de revista.
